Amenaza

«En España las superbacterias ya matan a más personas que los accidentes de tráfico»

Entrevista a la doctora Andrea Muras, microbióloga, científica y divulgadora

CONTRA 20 AGOSTO
CONTRA 20 AGOSTOLa RazónLa Razón

Doctora en Microbiología, Andrea Muras combina su labor investigadora con la divulgación. Su último libro, «La guerra contra las superbacterias. Una historia de ciencia, pero sin ficción», de Alienta (Editorial Planeta), resulta demoledor.

¿Qué son las superbacterias?

Aquellas capaces de resistir la acción de varios tipos de antibióticos. Son cada vez más difíciles de atajar porque existen menos opciones de tratamiento que sean eficaces. De hecho, las bacterias multirresistentes son consideradas por la Organización Mundial de la Salud (OMS) una de las mayores amenazas a las que va a tener que enfrentarse el ser humano en el siglo XXI.

¿Esa amenaza resulta ya inminente?

Las superbacterias son cada vez más numerosas y es más normal encontrarlas como las responsables de las infecciones. De hecho, ya matan de forma directa a 1,2 millones de personas en todo el mundo. Para que te hagas una idea de en qué punto estamos te daré un dato que a mí me parece brutal: en España las bacterias matan ya a más personas que los accidentes de tráfico.

¿Qué hemos hecho o estamos haciendo mal para llegar a ese punto?

Las bacterias son unos seres vivos increíblemente eficaces a la hora de buscar formas de vivir, incluso en sitios en los que no deberían. Sin embargo, las personas hemos acelerado su aparición de diferentes formas. Entre ellas destaca el mal uso de los antibióticos que llevamos haciendo desde hace unos cien años –y no solo en la medicina, sino también en el uso excesivo en la ganadería o la agricultura (algo ahora muy controlado)–. En mi libro lo comparo con la crisis climática. El cambio climático es algo natural, es parte de un proceso cíclico; el problema llega cuando las personas interferimos. No dejamos que el sistema natural vaya a su ritmo y se estabilice a sí mismo, sino que lo aceleramos. Y ahí es cuando viene el problema.

Dice que en 2050 serán una de las principales causas de mortalidad. ¿Por qué?

Son una gran amenaza a nuestra forma de vida porque son resistentes a varios tipos de antibióticos y, por lo tanto, cada vez es más difícil tratar las enfermedades que causan. Imagina una vida en la que no te puedas operar (incluyendo extracciones de muelas, cesáreas, apendicetomías, etc.) o si lo haces corres un riesgo grave de infección.

¿Qué «armas» tenemos frente a ellas?

La comunidad científica internacional está muy comprometida y está investigando no sólo para desarrollar nuevos y mejores antibióticos, sino que también se está trabajando en darle una vida útil más larga a los que ya existen y en encontrar terapias antimicrobianas alternativas que puedan sustituir o reforzar a los tratamientos médicos disponibles. Lo ideal sería encontrar formas de evitar las infecciones con pocas probabilidades de que surjan resistencias también contra esas nuevas terapias, aunque cualquier tipo de avance es más que bienvenido. La urgencia del problema y la necesidad de una solución es tan grande que cada vez son más los grupos científicos interdisciplinares que participan en esta búsqueda. Por ejemplo, la inteligencia artificial puede que juegue un papel clave a la hora de encontrar una salida.

Pero las bacterias son necesarias para nuestra vida, ¿verdad?

Son esenciales para nuestra salud y que las bacterias patógenas (aquellas que causan enfermedades) son solo una pequeña parte de las que existen. Pero no solo eso, sino que la vida, tal y como la conocemos, empieza con las bacterias, ya que sobre ellas se sustentan el resto de seres vivos.

Con la covid aprendimos la importancia de lavar las manos, ¿deberíamos mantener esa sana costumbre?

Sin ninguna duda. Mantener unos buenos hábitos de higiene resulta esencial para prevenir infecciones de todo tipo. Este pequeño gran gesto supuso todo un avance en la prevención de infecciones cuando se implementó en la práctica médica a mediados del siglo XIX.

¿Qué podemos hacer para echar el freno a la amenaza de las superbacterias?

Mientras la ciencia trata de encontrar una solución eficaz para seguir tratando las enfermedades bacterianas, la sociedad tiene que asumir su papel en esta guerra contra las superbacterias. Lo primero que debemos hacer como ciudadanos es informarnos sobre lo que está ocurriendo, y qué podemos hacer para ser parte de la solución, pero también cómo hemos llegado hasta aquí. Cosas sencillas que cualquier lector podría hacer para ayudar en esta guerra contra las superbacterias: seguir las indicaciones del médico, desechar los antibióticos de forma responsable, mantener las vacunas al día, lavarse las manos o comer sano.