Psiquatría

EL MDMA reduce los síntomas del trastorno por estrés post-traumático

La sustancia- combinada con terapia cognitivo-conductual- redujo 10 puntos la gravedad del cuadro clínico en el 86% de los 104 participantes de un estudio fase III

El aislamiento involuntario puede causar estrés. Entre un diez y un quince por ciento de las personas que atraviesan por una situación como esta pueden desarrollar estrés postraumático
El aislamiento involuntario puede causar estrés. Entre un diez y un quince por ciento de las personas que atraviesan por una situación como esta pueden desarrollar estrés postraumáticolarazon

El MDMA (también conocido como éxtasis) es una de las drogas psicodélicas que actualmente se investigan para el tratamiento de trastornos mentales como el trastorno por estrés posttraumático (TPEP), el trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) o la depresión mayor, junto a otras como a la psilocibina o la dimetiltriptamina (DMT). De todas ellas, el MDMA es la que más cerca está de ser aprobada como medicamento, en concreto para el tratamiento del TPEP. La última evidencia en su favor es un estudio fase III (la penúltima fase antes de poder ser autorizado por las agencias reguladoras) que muestra que esta droga resultaría eficaz a la hora de reducir los síntomas del TPEP moderado/grave.

El TEPT es una afección neuropsiquiátrica grave que afecta aproximadamente al 3,6% de la población mundial. En Estados Unidos el porcentaje aumenta hasta el 5%. Su manejo es particularmente complicado en personas que experimentan el subtipo disociativo, una exposición recurrente a traumas y comorbilidades, trastornos del estado de ánimo y trastornos por uso de alcohol y sustancias.La suma de todos estos factores se asocia con exacerbación de los síntomas, resistencia al tratamiento e interrupción del mismo.

Se sabe desde hace décadas que las memorias relacionadas con el trauma no se recuerdan y se vuelven a guardar intactas, sino que, cada vez que la persona las vuelve a sacar a la luz ante un terapeuta, se va modificando su componente emocional. Y ahí es donde el MDMA interviene, ya que favorece el reprocesamiento de recuerdos traumáticos y la participación emocional en el proceso terapéutico. Así se ha demostrado en el trabajo publicado en Nature, que comparó el tratamiento de MDMA más terapia cognitivo -conductual con placebo más terapia cognitivo-conductual en un centenar de pacientes con TEPT disociativo.

Un 86,5% de los pacientes del primer grupo respondieron al tratamiento con una mejoría clínicamente significativa a las 18 semanas- definida como una reducción de ≥10 puntos en la puntuación de gravedad total de las escala de referencia en el TPEP -CAPS-5,- frente al 69% en el segundo grupo. Además, el 46,2% de los tratados con MDMA cumplieron con los criterios de remisión, frente al 21% de los del grupo placebo.

Por otro lado, se registraron efectos adversos leves- taquicardias y palpitaciones- en cerca de un 10% de los pacientes.