Día Mundial

Las personas con Asperger piden que se reconozca oficialmente su discapacidad psicosocial

Reclaman en el Senado que se les garantice acceso al empleo público, ya que el desempleo en este colectivo alcanza el 84%

"337 km" es un montaje de la compañía madrileña La Belloch sobre el síndrome de Asperger
Escena de "337 km", un montaje de La Belloch sobre el síndrome de AspergerSusana Martín

Las personas con Asperger se sienten "marginadas en las políticas sociales, educativas y sanitarias del Estado" en nuestro país. Así lo han manifestado el presidente de la Confederación Asperger España (Confae), Rafael Jorreto, y la secretaria de su junta directiva, Eva García, hoy, en una compareciencia ante el Senado con motivo del Día Mundial de esta enfermedad.

La categoría de síndrome de Asperger apareció en 1993 en la clasificación internacional de las enfermedades y desapareció en 2013, pues se comprobó que había "cierto solapamiento" con el autismo y, desde entonces, se habla de la condición como una entidad "más amplia, como un espectro en el que caben personas con capacidades, intereses y necesidades de apoyo muy distintas". Es por ello por lo que, a pesar de que ya no existe esta categoría clínica, el síndrome de Asperger "sigue generando un sentimiento de identidad y de seguridad para aquellos que, hasta 2013, recibieron dicho diagnóstico".

Los afectados son vulnerables, sinceros, dicen lo que piensan, pero también son muy crédulos y por eso su riesgo de sufrir engaños, fraudes, extorsiones o abusos es mayor, y la incomprensión y el rechazo de los demás les genera ansiedad, depresión y un gran daño en su autoestima. Así, se enfrentan "barreras invisibles" debido a que, aunque no presentan discapacidad intelectual, sus dificultades sociales, emocionales y comunicativas siguen sin ser reconocidas adecuadamente y éstas les repercute de forma notoria en su bienestar emocional.

Aunque las personas con Asperger suelen tener una capacidad intelectual media e incluso superior a la media, les resulta difícil reconocer y comprender las reglas sociales no escritas (como esperar turno, saludar, dar las gracias o guardar las distancias al conversar) y, aunque quieren relacionarse con los demás, muchas veces no saben cómo hacerlo ya que les resulta muy complejo darse cuenta de sus sentimientos.

Por ello, reclaman que se les reconozca oficialmente su discapacidad psicosocial, para garantizar su acceso al empleo público y a mejores condiciones de vida en todos los ámbitos, según informa EFE.

Altos índices de acoso escolar, suicidio y desempleo

Casi la totalidad de las personas con Asperger en edad escolar sufre algún tipo de acoso, a veces sin ser consciente de ello, debido a su dificultad de interpretar lo que está pasando, ha explicado Jorreto. Lo peor es que la mayoría sufre de por vida las graves secuelas de este acoso y se traducen en mayor ansiedad a la hora de relacionarse con los demás y en problemas también de salud mental.

"Tenemos que acabar con el tema del acoso escolar", les ha instado a los senadores. "Necesitamos que haya una acción jurídica de forma que los protocolos sean efectivos, no que estén pensados para salvar las responsabilidades de los equipos directivos donde sean juez y parte", ha apostillado.

A ello se une que el índice de desempleo entre las personas con Asperger es muy alto: alcanza el 84 %, y eso a pesar de que son personas que pueden tener formación media y superior.

Pero lo más grave de todo es el índice de suicidios. La ideación suicida tiene una prevalencia de más de un tercio, el 34,2 %: los planes suicidas, de un 21,9%, y las conductas suicidas un 24,3 %. Datos preocupantes y mucho más altos que los de la población general. Por eso, los respresentantes de los pacientes han demandado una especial atención a la salud mental de este colectivo, que incluya el seguimiento adecuado de los casos de riesgo.