Limpieza

10 consejos de los expertos para mantener la ropa del gimnasio libre de olores y prolongar su vida útil

Además de estar fabricadas con tejidos sintéticos, las prendas que utilizamos para ir al gimnasio también están sometidas a unas condiciones muy particulares

La ropa deportiva está fabricada con materiales destinados a la absorción de la humedad, como la lycra, el spandex o el poliéster | Fotografía de archivo
La ropa deportiva está fabricada con materiales destinados a la absorción de la humedad, como la lycra, el spandex o el poliéster | Fotografía de archivoLa RazónLa Razón

Lavar la ropa del gimnasio tiene mucho más intríngulis que simplemente echarla a la lavadora. De hecho, las prendas de este tipo necesitan una serie de cuidados de los que no solemos ser conscientes. Afortunadamente, el blog “Apartment Therapy”, especializado en decoración y limpieza, compartió una lista con los nueve pasos que nunca debemos saltarnos a la hora de hacer la colada de ropa deportiva:

Particularidades de la ropa deportiva

La característica principal de la ropa deportiva es que está fabricada con materiales destinados a la absorción de la humedad, como la lycra, el spandex o el poliéster. Esto hace que, después de una sesión de ejercicio intenso, acaben totalmente empapadas de sudor. Esta característica hace que este tipo de tejidos necesiten de una serie de cuidados y procesos de limpieza especiales para preservar el color, la forma y la elasticidad de las prendas deportivas.

La ropa de deporte está fabricada con unos materiales muy específicos con el objetivo de absorber el sudor y permitir la transpiración | Fotografía de archivo
La ropa de deporte está fabricada con unos materiales muy específicos con el objetivo de absorber el sudor y permitir la transpiración | Fotografía de archivolarazon

A continuación, tienes una serie de consejos que te serán útiles para lavar estas prendas y que queden impolutas, mientras que se mantienen en perfecto estado durante mucho más tiempo:

1. Que respire antes de lavarla

Cuando finalizamos una dura sesión de ejercicio, lo primero que queremos hacer es quitarnos cuánto antes la ropa del gimnasio, sobre todo si somos de esos que sudamos mucho. La ropa húmeda en contacto con la piel puede favorecer la aparición de hongos, entre otras cosas. Algunas personas se quitan la ropa directamente en el gimnasio, metiendo todas estas prendas en la mochila y otros esperan a llegar a casa, pero en cualquiera de los casos, deberíamos dejarla al aire hasta que se seque. Y en ningún caso deberíamos dejarla encerrada más tiempo del necesario en un cesto de la ropa sucia o en una mochila. Dejar que se airee antes de lavarla hará que la limpieza sea mucho más sencilla e impedirá que los olores se impregnen más de la cuenta.

2. Un chorrito de vinagre

Si sudamos mucho o si nuestro sudor es especialmente fuerte, lo que podemos hacer es Introducir la ropa en agua fría con un poco de vinagre blanco durante -al menos- una hora. Este método no sólo eliminará los olores más desagradables, sino que también descompondrá las manchas de sudor y hará que sea más sencilla su limpieza.

3. En agua fría, mejor

Es esencial que, para la limpieza de este tipo de tejidos, utilicemos siempre agua fría. El calor puede llegar a destruir la elasticidad del tejido, haciendo que la ropa se encoja y que sea más susceptible a sufrir algún desgarro. Así como favorecer que pierda su color original.

4. Evita la secadora

Es importante recordar que tanto el exceso de calor en el agua que se usa para lavar la ropa como el aire caliente al secarla pueden dañar los materiales. Por lo tanto, se recomienda siempre tender la ropa deportiva para que se seque de forma natural.

5. No eches suavizante

El suavizante creará una película protectora que “atrapará” los olores. Por eso, lo mejor es prescindir de su uso por completo. Además, el tipo de tejidos sintéticos con el que se fabrica la ropa de gimnasio, como la lycra, el spandex o el poliéster, suelen adaptarse muy bien a nuestra piel y su uso, aun sin suavizante, suele ser bastante cómodo.

Lavadora
LavadoraDreamstimeDreamstime

6. Del revés será más efectivo

Es importante dar la vuelta a las prendas porque eso hará que se conserve mejor el color y que la limpieza sea mucho más directa. Aquellas zonas más expuestas al sudor (como las axilas en el caso de una camiseta) durante el entrenamiento, también lo estarán ahora a los productos de limpieza.

7. Detergentes específicos

En cuanto a los productos que debemos utilizar para limpiar estás prendas, la mejor opción siempre serán los detergentes específicos. Estos productos están diseñados para la limpieza de materiales sintéticos, atacando directamente a las bacterias que crean los malos olores y las manchas.

8. No te pases

Debemos recordar controlar la cantidad de detergente que echamos a la lavadora, porque demasiado detergente generará demasiada espuma. Y eso impedirá el correcto enjuagado, lo que puede -a su vez- generar el desarrollo de hongos.

9. Prueba con un eliminador de olores

Antes explicábamos que lo mejor para deshacernos de los olores más desagradables y persistentes de la ropa del gimnasio era dejarla en reposo durante una hora, más o menos. Es una técnica que resulta muy eficaz, por lo que debería ser más que suficiente. Pero si quieres estar totalmente seguro de que la desinfección es total y de que todos estos olores han desaparecido, lo que también puedes hacer es añadir media taza de vinagre blanco al ciclo de enjuague. Y si todo lo anterior falla (aunque es casi imposible), también puedes recurrir a un eliminador de olores en spray.

Federer se seca el sudor durante su partido contra Millman
Federer se seca el sudor durante su partido contra MillmanKAI PFAFFENBACHReuters

10. ¿Y las zapatillas?

Al autor de la entrada del blog “Apartment Therapy” se le olvidó mencionar que las zapatillas de deporte también tienen que lavarse de vez en cuando. Sí que es cierto que no con tanta frecuencia como el resto de la ropa deportiva, pero sigue siendo importante hacerlo cada cierto tiempo. Las deportivas de material sintético pueden limpiarse, en general, con un trapo humedecido en una mezcla de una cuarta parte de alcohol y 3 partes de agua.