Sociedad

Cambio de hora en España: Ya se conocen todos los que habrá al menos hasta 2026

El BOE publica el calendario del período del horario de verano de los próximos cuatro años

Cambio de hora en los relojes
Cambio de hora en los relojesRicardo RubioEuropa Press

Quedan pocos días para que se produzca el primer cambio de hora de 2022. El próximo 27 de marzo, a las 2.00 horas de la madrugada todos los españoles deberemos adelantar los relojes hasta las 3 horas. En ese momento se comenzará a utilizar el huso horario veraniego. Pero, ¿qué día cambiaremos al horario de invierno? Desde este martes ya se conoce. Y no solo las fechas de este 2022, también las de los próximos cuatro años.

El Boletín Oficial del Estado (BOE) ha publicado una orden en la que se informa del “calendario del periodo de la hora de verano correspondiente a los años 2022 a 2026″. El cambio de hora que marcará el final del horario de verano en este ejercicio se producirá el 30 de octubre en el que a las 3 horas de la madrugada se retrasará el reloj una hora. Según esta norma, los próximos cambios de hora serán:

Fechas de inicio del horario de verano:

- 2022: Domingo, 27 de marzo.

- 2023: Domingo, 26 de marzo.

- 2024: Domingo, 31 de marzo.

- 2025: Domingo, 30 de marzo.

- 2026: Domingo, 29 de marzo.

El comienzo del período de la hora de verano tendrá lugar a las dos horas de la madrugada (una en Canarias): la hora oficial española se adelantará sesenta minutos, por lo que ese día tendrá una duración oficial de veintitrés horas.

Fechas de comienzo del periodo del horario de invierno:

- 2022: Domingo, 30 de octubre.

- 2023: Domingo, 29 de octubre.

- 2024: Domingo, 27 de octubre.

- 2025: Domingo, 26 de octubre.

- 2026: Domingo, 25 de octubre.

La terminación del período de la hora de verano tendrá lugar a las tres horas de la madrugada (dos en Canarias). En ese momento la hora oficial española se retrasará sesenta minutos, por lo que ese día tendrá una duración oficial de veinticinco horas.

Los cambios de hora se producen dos veces al año, una en marzo y otra en octubre. La Directiva Europea 2000/84/CE es la responsable de que se produzca esta variación, sin excepción, en todos los estados miembros de la Unión Europea. El cambio es obligatorio y siempre se produce en las mismas fechas y horas en el conjunto de la UE, de modo que no existe la posibilidad de que un Estado miembro no aplique este cambio de hora.

El cambio de hora en nuestro país se mantiene pese a la oposición de la ARHOE-Comisión Nacional para la Racionalización de Horarios Españoles que rechaza esta medida debido principalmente a sus repercusiones sobre la salud y las personas. Varios estudios han vinculado el cambio horario con efectos nocivos para la salud que se producen por la alteración de sueño como insomnio, somnolencia, irritabilidad o mareos. También se ha relacionado incremento de la siniestralidad vial. Una investigación realizada por científicos españoles, indica que la fatiga que provoca el cambio de hora puede provocar un aumento de la mortalidad en las carreteras de 1,5 vidas perdidas cada año. Otra consecuencia de la alteración del sueño sería el incremento de entre un 4% y un 29% en el número de infartos agudos del miocardio. Según el European Review for Medical and Pharmacological Sciences los ataques cardiacos durante los primeros tres días de la semana después del cambio al horario de verano aumentan aproximadamente un 5%.

El Consejo de Ministros acordó en 2018 la creación de una Comisión de personas expertas para el estudio de la reforma de la hora oficial, encargada de la elaboración de un informe de evaluación de las disposiciones reguladoras del cambio horario, así como sobre la conveniencia de mantener en España la hora de Europa central. Ello respondía asimismo al inicio de un proceso de modificación de la Directiva 2000/84/CE, que dio lugar a la presentación por la Comisión Europea de una propuesta que eliminaba los cambios de hora estacionales. Esta propuesta venía avalada por una encuesta realizada a 4,6 millones de europeos, en la que un 84% de los cuales se manifestaron a favor de abolir el cambio horario. En España, un 93% de los ciudadanos consultados, se mostró a favor de mantener la hora de verano permanentemente.

No obstante, los Veintiocho consideraron entonces que la iniciativa era prematura y se aplazó la decisión. El informe de la Comisión Europea, de fecha 20 de marzo de 2019, concluyó, por un lado, que no era aconsejable producir ningún cambio precipitado en los husos horarios mientras no existiese un consenso compartido y una difusión práctica a la ciudadanía de los riesgos y oportunidades que comporta. Por otro, que el análisis de los husos horarios deberá venir siempre vinculado al de los usos del tiempo al objeto de clarificar conceptos y procurar pautas de comportamiento que procuren determinados modelos compartidos como el de la corresponsabilidad.