Nupcialidad

Los matrimonios caen un 46% en la pandemia

La caída de los datos en España es mayor que la de Alemania o Francia pero similar a Portugal o Italia

Caídas de matrimonios en España
Caídas de matrimonios en EspañaMiguel Roselló

La caída de la nupcialidad supone un fenómeno muy extendido en las sociedades occidentales y España no es una excepción. El número de matrimonios de diferente sexo se desplomó desde el máximo de 271.347 registrado en 1975 hasta el mínimo de 87.481 en 2020. La caída respecto a 2019 fue del 46%, mayor que la de Alemania (-10%), Países Bajos (-21%), Suecia (-22%) o Francia (-34%), pero similar a la que se verificó en otros países del sur de Europa (Italia: -47%; Portugal: -43%), según el último informe de Focus on Spanish Society, publicación editada por Funcas, que recoge datos del INE y de Eurostat. Con todo, la caída más abrupta se observó en Irlanda (-53%).

Dejando al margen 2020, un año extraordinario por las restricciones que la pandemia provocó en la vida social, durante el quinquenio entre el final de la crisis y el comienzo de la pandemia (2015-2019), el número anual medio de matrimonios (166.000) se quedó muy por debajo de la media anual del quinquenio previo a la crisis económico-financiera (2003-2007): 208.000.

Por eso se puede decir que la nupcialidad todavía no se había recuperado de la crisis económica cuando la pandemia le asestó otro golpe, aun teniendo en cuenta que las cohortes de jóvenes en edades típicamente nupciales eran en 2003-2007 más voluminosas que en 2015-2020.

En general, los nuevos matrimonios presentan una evolución muy dependiente del ciclo económico –caen en periodos recesivos y aumentan en periodos expansivos–, pero por encima de estas oscilaciones destaca la solidez de la tendencia decreciente. Focus on Spanish Society también constata la caída de la proporción de primeros matrimonios (sobre el total de enlaces celebrados). En España, por ejemplo, hasta el año 2000 los primeros matrimonios representaban entre el 95% y el 99% de todos; en las primeras décadas de este siglo, el porcentaje se ha reducido hasta el entorno del 80%.

En otros países europeos de tradición católica, como Italia, Portugal e Irlanda, se observan descensos similares en las primeras nupcias. En definitiva, en todos estos países se casa mucha menos gente soltera, pero lo hace mucha más gente que ya estuvo casada.

Esta tendencia general decreciente de la nupcialidad obedece a diversas razones, entre las que cabe señalar –además de la incorporación generalizada de las mujeres al mercado de trabajo–, la reducción de los incentivos institucionales al matrimonio.

Ahora bien, la pérdida de importancia del matrimonio en España se circunscribe a las parejas heterosexuales. Las bodas entre personas del mismo sexo también cayeron en 2020 (36% en el caso de las mujeres y 40% en el de los hombres), pero menos que las celebradas entre personas de diferente sexo. No hay que olvidar, sin embargo, que los matrimonios homosexuales fueron algo menos del 4% de todos los registrados ese año.

Migración

La evidencia disponible hasta el momento permite concluir que la Gran Recesión supuso un mayor golpe a la inmigración que la pandemia. En efecto, según los datos de la Estadística de Migraciones, recogidos en Focus on Spanish Society, los flujos de entrada de extranjeros a España se redujeron de forma intensa en los tres primeros semestres de la pandemia, pero en ninguno de ellos las entradas fueron menos que las registradas entre 2012 y 2016.

Una conclusión semejante se extrae del análisis de los datos de emigración. En la primera mitad de 2021 aumentaron las salidas de extranjeros desde España. Pero aunque estas se multiplicaron por 1,4 respecto al segundo semestre de 2019, se quedaron muy por debajo de las observadas durante los años centrales de la crisis económico-financiera (entre el segundo semestre de 2009 y 2013).

En definitiva, en 2020 aumentó en todos los países europeos la población nacida en el extranjero, pero en España lo hizo en mayor proporción que en otros países (3%, la misma tasa que en 2017 e inferior a las de 2018 [5%] y 2019 [7%]). Al final de ese primer año de pandemia, la población residente en España nacida en el extranjero suponía el 15,2% de la población total, porcentaje superior al de Francia (12,8%) e Italia (10,6%), pero inferior al de Irlanda (17,6%), Alemania (18,2%) y Suecia (19,7%).