Vaticano

Alegato del Papa contra la «burda» pornografía

Bergoglio manifestó también ayer su deseo de visitar Argentina el año próximo

Pope Francis celebrates Ash Wednesday Mass
Pope Francis celebrates Ash Wednesday MassFABIO FRUSTACIAgencia EFE

El Papa Francisco señaló ayer la falta de educación sexual como un problema para los jóvenes y afirmó que la pornografía es «la comercialización más burda del amor», durante un la clausura del primer Congreso Mundial de Ecociudades Educativas.

«La pornografía es, en este momento, la comercialización más burda del amor», afirmó el Pontífice tras indicar que la educación «es un deber de la sociedad y de los padres», que entre sus cometidos han de preparar a los más jóvenes para que sepan «qué es el amor en la vida. Por falta de educación sexual se termina en la comercialización del amor. El amor no es para comercializar y los chicos (jóvenes) no deben ser usados», apuntó Francisco al responder a una pregunta formulada por uno de los participantes de la organización Scholas desde Puerto Vallarta (México) sobre la violencia sexual y el sistema educativo.

El Pontífice dialogó desde Roma, mediante videoconferencia, con jóvenes de Argentina, Estados Unidos, México y la Amazonía colombiana, además de un grupo de una residencia de España en la que ancianos reciben las visitas regulares de estudiantes.

Cada uno de los participantes expuso a Bergoglio sus dudas sobre el futuro de la sociedad, para recibir su consejo, aunque en el evento también confirmó su intención de viajar a Argentina, su país natal, el próximo año.

Sobre la convivencia entre ancianos y jóvenes, el argentino subrayó que es necesaria para que una sociedad «sobreviva». «Una sociedad se echa a perder cuando se pierde la unión de la raíz con el tronco, si no nos unimos con las raíces, si no recibimos la savia de allí, nos secamos», sostuvo antes de alertar de que en «algunos sectores de la sociedad se esconde a los viejos. El anciano no debe estar guardado, y ellos también deben aprender de los jóvenes, de su ilusión», añadió al dirigirse a los particopantes del programa «Estar Juntos», que une a varias generaciones en la Residencia Claret de Granada (España).