Sanidad

Melilla, dos años sin cribados de cáncer de mama, útero y colon

El Ingesa, dependiente del Ministerio de Sanidad, eludió su responsabilidad de realizarlos entre 2023 y 2025

El nuevo Hospital Universitario de Melilla ha abierto sus puertas oficialmente este lunes de manera parcial y con las primeras consultas externas 19 años después de su anuncio por el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero durante su visita oficial a Melilla del 31 de enero de 2006. De este modo, la nueva infraestructura sanitaria ha comenzado su andadura tras una inversión de 150 millones de euros y nueve meses de preparación por parte de los profesionales sanitarios para ponerlo todo a punto para su puesta en marcha.
El nuevo Hospital Universitario de Melilla ha abierto sus puertas oficialmente este lunes de manera parcial y con las primeras consultas externas 19 años después de su anuncio por el expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero durante su visita oficial a Melilla del 31 de enero de 2006. De este modo, la nueva infraestructura sanitaria ha comenzado su andadura tras una inversión de 150 millones de euros y nueve meses de preparación por parte de los profesionales sanitarios para ponerlo todo a punto para su puesta en marcha. GinerAgencia EFE

Mientras la ministra de Sanidad señala con el dedo a comunidades gobernadas por el PP, como a la Comunidad Valenciana, ayer mismo, por "desproteger a las mujeres" debido a su, a su juicio, "irresponsabilidad" en los cribados del cáncer, las dos ciudades autónomas que dependen directamente de su gestión, Ceuta y Melilla, tienen motivos suficientes para ponerle "la cara colorada".

Desde que se hicieran públicas, hace dos semanas, las supuestas irregularidades en las pruebas de detección del cáncer de mama en Andalucía, la ministra no ha parado de atacar a las autonomías con gobierno "popular", dudando de la calidad de sus cribados y acusándolas, como a Madrid, de "no preocuparse por la salud de las mujeres".

En su cruzada en pos de la responsabilidad sobre un asunto que no es de su competencia, la semana pasada exigió por carta a todas las CC AA que presentaran información detallada sobre el funcionamiento de sus programas de cribado de cáncer, emplazándoles a hacerlo este jueves el Pleno del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (Cisns). En la misiva, el Ministerio consideraba imprescindible "recibir todos los informes técnicos que permitan evaluar el alcance real del fallo y su impacto sobre la población femenina afectada".

Ante esta demanda, las autonomías populares anunciaron ayer que no presentarán dichos datos al entender que han sido solicitados por "estrategia de confrontación política y de distracción" y que, además, "son competencia exclusiva de las comunidades autónomas" cuya "implantación, seguimiento y evaluación" vienen realizando "desde hace años con plena autonomía, profesionalidad y éxito contrastado". Así figura en las cartas que enviaron ayer a Mónica García los consejeros de Sanidad de las autonomías gobernadas por el PP, a las que ha tenido acceso LA RAZÓN.

Lo que no ha calculado la ministra es que en los territorios en los que la Sanidad sí es de su competencia, a través del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa), es decir, Ceuta y Melilla, se han cometido irregularidades en los cribados que han puesto en riesgo la salud de la población.

En Melilla, en concreto, entre febrero de 2023 y enero de 2025 no se llevó a cabo ni una sola prueba de detección de cáncer de mama, útero y colon. La causa: la dejación de funciones por parte del Ingesa, que tiene la responsabilidad asistencial en la ciudad autónoma.

En febrero de 2023 terminó la vigencia del convenio de colaboración entre el Ingesa y la Consejería de Sanidad de Melilla para la realización de los cribados de cáncer de mama, útero y colon a través de una empresa externa. Un contrato que ni siquiera tenía sentido que existiera porque la ley establece que es el Ingesa el que tiene la competencia asistencial y, la Consejería de Sanidad, la de realizar las campañas de información y las llamadas a la población.

"En ese momento se dejaron de hacer cribados y a nadie le importó", explica a LA RAZÓN la senadora del PP por Melilla, Isabel Moreno. "La Consejería de Sanidad de Melilla lo reclamó a Sanidad durante más de un año, sin recibir ninguna respuesta. No se volvieron a poner en marcha los cribados poblacionales hasta enero de este año, después de meses de persecución del PP para que se firmara un nuevo contrato. Lo llevabamos pidiendo desde que llegamos al gobierno, después de las elecciones de mayo de 2024".

El acuerdo, a juicio de Moreno, no es más que "un adorno", porque lo que hace "es recoger las competencias que tiene cada uno: la ciudad en el ámbito de la información a la población y el Ingesa en el asistencial. Así que hasta dudamos de si Sanidad y el Ingesa conocen bien sus competencias". "En una ciudad de 90.000 personas es una irresponsabilidad y una temeridad haber estado dos años sin hacer cribados de cáncer, jugando con la vida de los y las melillenses; el nivel de abandono es inconmensurable", concluye.

Sin especialista y en precario

En Ceuta la situación no ha sido tan grave ya que, desde 2001, la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales y el Ingesa tienen un convenio que desarrolla los programas de detección precoz de cáncer de mama, útero y colon. Sin embargo, durante unos años entre 2017 y 2023, el único profesional que realizaba las mamografías y las ecografías de mama era un técnico de FP que, cuando veía algo sospechoso, "mandaba las fotos" de las pruebas de las pacientes a un radiólogo que no estaba en Ceuta, según relatan fuentes sanitarias.

Aunque la situación se puso en conocimiento del Ingesa y del Ministerio de Sanidad, no hicieron nada. Durante años, muchas pacientes tuvieron diagnósticos erróneos, tardíos, falsos negativos y se vieron obligadas a buscar segundas opiniones en especialistas de otras autonomías, como ha podido saber LA RAZÓN.

La dramática situación de la Sanidad pública en la ciudad, especialmente con respecto a la falta de médicos especialistas, es sobradamente conocida y ha sido denunciada en muchas ocasiones desde las páginas de este periódico. En el ámbito del radiodiagnóstico, el sindicato médico de la ciudad lleva meses denunciando que solo hay 4 radiologos en activo para toda la población que acude al Hospital Universitario de Ceuta. El elevado porcentaje de funcionarios que viven en la ciudad y que eligen la opción de la asistencia privada (a través de las mutuas Muface e Isfas, mayormemte)- entre el 30 y el 40% de la población-, supone un alivio de la presión asistencial en la deteriorada Sanidad pública.