Archivada la causa sobre los efectos de la contaminación en el semen de los tarraconenses

Un juez ha archivado la causa para investigar si la contaminación de las químicas de Tarragona provocó la mala calidad del semen de los tarraconenses, ya que entiende que existen "múltiples causas", como la alimentación, las drogas o la ropa ceñida, más allá de las emisiones de unas 200 empresas.

En un auto, el titular del juzgado de instrucción número 1 de Tarragona reconoce que se ha constatado la existencia de un delito contra el medio ambiente, aunque precisa que no hay motivos para acusar a ciertas personas como autoras, cómplices o encubridoras, porque resulta "extremadamente difícil imputar objetivamente a una o varias empresas determinadas"del origen de los vertidos o emisiones susceptibles de afectar a la calidad del semen.

El juez resalta en su resolución, que puede ser recurrida, que un informe del Seprona de la Guardia Civil ha constatado que cerca de 200 empresas emiten entre sus residuos alguno de los productos o subproductos que podrían tener incidencia en las alteraciones de la fertilidad masculina, si bien no se ha podido precisar el contenido específico de los residuos de cada una ni determinar las cinco que emiten mayor cantidad de productos contaminantes al medio ambiente.

Además, el juez advierte que el estudio del Seprona sobre estas emisiones "no es suficiente"para atribuir a las casi 200 empresas químicas la mala calidad del semen de los vecinos de Tarragona, ya que "existen otras múltiples causas"que pueden provocar estos efectos.

El juez se remite a un estudio forense que acredita que entre las "múltiples causas"que pueden ocasionar la mala calidad del semen figuran elementos como "los hábitos alimenticios, drogas, alcohol, tabaco u otros tóxicos, el empleo de determinados detergentes u otros productos de aseo diario, la contaminación generada por determinados ambientes industriales, los vehículos u otros tipos de humos o simplemente el uso de ropa particularmente ceñida". "En definitiva, existen diversas circunstancias que pueden afectar a la mala calidad del semen", insiste el juez.

El magistrado reconoce que el delito contra el medio ambiente es de "carácter abstracto"y tan sólo exige de un "peligro potencial de riesgo grave, sin necesidad de que el riesgo se concrete en un resultado dañoso".

No obstante, remarca que este caso se enfrenta con la "dificultad a la hora de concretar el círculo de los sujetos potencialmente responsables de la producción de estos daños, sin caer en fórmulas de imputación genérica o en actividades de investigación prospectivas o inquisitoriales".

"La imputación a una persona determinada, por las graves consecuencias que implica, exige individualizar una razón de utilidad social que justifique la incriminación, lo cual solo existe en la medida en que concurra un pronóstico razonable de que con ello podrá cumplirse los fines de la investigación", apunta el juez.

Por este motivo, el magistrado acuerda archivar la causa, al apelar a la tesis de la falta de autor conocido y rechazar las imputaciones que contengan "trazos de genericidad intolerable".

"Los informes que se han aportado hasta el momento no permiten concretar un origen determinado susceptible de individualizarse en una responsabilidad penal concreta en una persona determinada", alega el juez.

El juez abrió la investigación en noviembre de 2010, después de que el grupo ecologista L'Escurçó presentara una denuncia a raíz de la publicación de un informe del Instituto Márquez que desveló que el semen de los tarraconenses era el peor de España debido a causas ambientales y a la industria química de la zona.