Curiosidades

Desaparecer sin dejar rastro en Japón: qué significa el johatsu y por qué ocurre

En Japón existe un término para quienes "se evaporan" de su vida: johatsu. No es magia ni leyenda urbana, sino un fenómeno social con décadas de historia, cifras discutidas y toda una economía discreta a su alrededor

Desaparecer sin dejar rastro en Japón: qué significa el johatsu y por qué ocurre
Desaparecer sin dejar rastro en Japón: qué significa el johatsu y por qué ocurreUnsplash

En sentido estricto, jōhatsu significa “evaporación”. En la jerga cotidiana nombra a quienes abandonan su hogar, trabajo y vínculos para empezar de cero en otra ciudad, a menudo con ayuda logística y manteniendo el anonimato. La palabra empezó a usarse en los años 60 y reapareció con fuerza en la década perdida de los 90, cuando el pinchazo económico trajo despidos, deudas y una cultura del estigma que empujó a algunos a desaparecer por voluntad propia. Desde entonces es un asunto tabú en la conversación pública, emparentado con otros fenómenos de presión social en el país.

¿Qué es exactamente el johatsu?

Es la decisión de romper con la identidad anterior: se corta el contacto con la familia, se abandona el círculo laboral, se cambia de barrio e incluso de nombre o apariencia. No siempre hay planificación; a veces se hace con lo puesto, y otras con apoyo de empresas apodadas “mudanzas nocturnas” que empaquetan de madrugada, gestionan traslados y alojamientos temporales y enseñan a dejar el menor rastro posible. La cultura pop y la no ficción han documentado el fenómeno de forma continuada, en 2025 se estrenó el documental Johatsu: Into Thin Air, centrado en quienes se marchan y en quienes intentan encontrarlos.

¿Cuántos “se evaporan” al año?

No hay un censo fiable y ahí nace parte del mito. Se estima que podrían desaparecer decenas de miles de personas cada año, pero las cifras fluctúan según la fuente. Las estadísticas oficiales de la Agencia Nacional de Policía registraron en 2015 unos 82.000 casos de personas en paradero desconocido… y casi todas fueron localizadas ese mismo año, las ONG sostienen que el johatsu voluntario está mal representado en esos datos. La discusión sobre los "100.000 al año" aparece de forma recurrente, y varios reportajes piden cautela con ese número. Lo seguro es que el fenómeno existe, pero su magnitud real sigue abierta al debate.

Quienes desaparecen suelen dirigirse a zonas baratas con trabajo precario y alojamiento por días. En Osaka, el histórico Kamagasaki -hoy parte de Nishinari-ku- ha sido durante décadas un imán para jornaleros y personas al margen, el propio topónimo fue retirado de mapas y comunicados oficiales para limpiar su estigma. En Tokio, el área conocida como San’ya funciona como referencia similar desde posguerra, con albergues, empleos temporales y una identidad que muchos locales evitan nombrar.

Leyes de privacidad y el papel de las "mudanzas nocturnas"

La privacidad japonesa añade otra capa, la APPI (ley de protección de datos) restringe que empresas e instituciones compartan datos personales con terceros sin consentimiento, con excepciones legales acotadas. En la práctica, si un adulto decide irse y no hay delito, es difícil conocer su paradero, incluso para familiares. Entre la protección de datos y el tabú social, prospera un mercado paralelo con detectives que venden paquetes para irse sin dejar rastro.