Sociedad

España apenas recupera el 25% de los envases plásticos, según Greenpeace

Más del 60% de los envases plásticos terminan en vertederos e incineradoras, sin contar la exportación

Tres activistas de Greenpeace desplegaron esta semana sus pancartas junto al dragón que instalaron en Gaztelugatxe para denunciar la «avalancha» de plástico al mar
Tres activistas de Greenpeace desplegaron esta semana sus pancartas junto al dragón que instalaron en Gaztelugatxe para denunciar la «avalancha» de plástico al marlarazon

Cuando reciclar no es suficiente

Greenpeace denuncia el fracaso del sistema de gestión de residuos

España apenas recupera el 25% de los envases plásticos

Más del 60% de los envases plásticos terminan contaminando el medioambiente en vertederos e incineradoras, sin contar la exportación

Solo el 25,4% de los envases plásticos se recuperaron en España en 2016, según una media de los datos aportados por las Comunidades Autónomas y los Ayuntamientos, y las caracterizaciones de residuos que hacen estas administraciones; una cifra que contrasta con los datos aportados por el Ministerio para la Transición Ecológica que lo eleva al 38% y que alcanza, incluso, el 77% para el conjunto de envases ligeros, si la cifra procede de Ecoembes. Ésta es una de las conclusiones del informe “Maldito Plástico: reciclar no es suficiente” que ha presentado hoy Greenpeace. En el estudio, la ONG analiza algunas de las trampas del reciclaje, aseverando que el sistema actual no es una panacea.

Según la información publicada por el Ministerio, la mayor parte de los envases plásticos no se reciclaron y fueron a vertedero (787.059 tn) o se incineraron (172.293 tn), esto supone un 63%. Si a esto se añaden los envases exportados (282.560 tn), de los que no existe plena garantía de que se reciclen, como ha comprobado Greenpeace en vertederos de Malasia, el porcentaje sube a más del 80%. La información oficial no cuantifica epígrafe, cuántos de estos envases pasan directamente al medio ambiente y terminan flotando en ríos y mares o descomponiéndose en bosques.

Las caracterizaciones de nuestra bolsa de la basura muestran que el 10,5% de la misma son envases plásticos de usar y tirar. Ello muestra la magnitud del problema. A lo que hay que añadir las ineficiencias del sistema de gestión de residuos, que no garantiza que depositar los envases en el contenedor correspondiente sea una garantía de reciclaje. Por ejemplo, los envases pequeños (menos de 10 cm), los envases plásticos que contienen PVC u otros materiales complejos, o las pegatinas, no se recuperan.

La investigación pone de manifiesto que no existen datos suficientemente auditados por las administraciones, fiables, y comparables entre sí, que permitan acercarnos a la realidad del problema. Una realidad que, según Greenpeace, se debe a que “las empresas envasadoras, distribuidoras y grandes superficies tienen la obligación legal de recuperar y reciclar el 100% de los envases vendidos, vemos que no sucede. Esto es un ahorro para estas empresas, al no hacerse cargo de esta obligación, y supone un sobrecoste para la ciudadanía, al tener que pagar la recuperación y tratamiento de estos residuos. Además, provoca un grave problema de contaminación al medio ambiente, al perderse todos los días decenas de millones de envases plásticos que se disgregan en forma de microplásticos (menores de 5 mm). Estos diminutos fragmentos de plástico, se acumulan en el mar, donde son ingeridos por la fauna marina y entran a formar parte de nuestra cadena alimentaria”.

“Debemos cambiar radicalmente nuestro consumo”, afirmó Julio Barea, responsable de la campaña de plásticos de Greenpeace. Tras hacer hincapié en que la responsabilidad de este problema recae en multinacionales, Barea hizo hincapié en que “deberíamos contar con leyes mucho más restrictivas por parte de las administraciones”. ¿Qué puede hacer el ciudadano? El fin del usar y tirar, con un cambio en los hábitos de consumo; comprar a granel y utilizar envases rellenables, etc.