Con la llegada de la primavera, muchos hogares se preparan para transformar sus espacios verdes en verdaderos refugios veraniegos. Sin embargo, uno de los problemas más comunes en esta época del año es la aparición de insectos invasores, especialmente las hormigas.

Aunque algunos optan por productos químicos para combatirlas, estos pueden afectar negativamente la salud del suelo. Los expertos de Thompson and Morgan advierten que los remedios químicos contra las hormigas ''solo funcionan si se aplican destruyendo todo el nido al mismo tiempo, lo cual puede extenderse profundamente bajo tierra y causar un gran trastorno en tu jardín''.

Ante este escenario, ha comenzado a circular un consejo ecológico y efectivo, compartido por la entusiasta del hogar Molly Miller, quien administra la cuenta de Instagram ''@therenegadehome''. Su método no tóxico consiste en utilizar un artículo cotidiano del baño: una pastilla de jabón.

Miller recomienda rallar una barra de jabón Irish Spring con un rallador de queso viejo y esparcir las virutas por los parterres para mantener alejadas a las plagas. También sugiere frotar directamente la barra en los marcos de las puertas para evitar que los insectos entren a la casa.

El jabón Irish Spring contiene picaridina, un compuesto repelente de plagas, y una fragancia cítrica que interfiere con la capacidad de los insectos para detectar las plantas, impidiendo que se establezcan. Las hormigas, sensibles a los olores fuertes, evitan elementos naturales como el vinagre, los cítricos y la menta.

Además, como complemento, Miller aconseja espolvorear canela molida alrededor de terrazas y patios para repeler hormigas y abejas. También puede mezclarse con agua y rociarse en las zonas más frecuentadas del jardín. Según expertos de Diamond Pest Control, la canela es eficaz cuando se aplica directamente sobre los senderos de las hormigas o en grietas por donde suelen aparecer.