El estado de alarma ha cambiado muchísimo nuestras rutinas: desde trabajar en casa hasta divertirnos a través de las pantallas. De hecho, tanto es así que no hay que salir a calle para nada más que para comprar comida o medicinas. El principal objetivo es de esta medida adoptada por el Gobierno es “evitar a toda costa los contactos”. Para conseguirlo, dos de las situaciones clave es mantenerse en casa y evitar los encuentros directos, lo que va a convertir a nuestros móviles y ordenadores en herramientas clave los próximo días. Pero, ¿qué pasa si se me rompen? ¿Puedo ir a la tienda? ¿Vienen a casa?

En primer lugar, no hay que perder de vista que, a pesar de que esté vigente el estado de alarma, las tiendas de informática y telefonía, las aseguradoras y los servicios técnicos siguen abiertas, por lo que acudir a ellas sería una opción. No obstante, la mayoría de ellos también prevén la posibilidad de gestionar la peticiones de forman online. Como es el caso de Apple. Según la información recogida en su página web, el servicio técnico continúa disponible tanto por vía online como por vía telefónica.

Si, por ejemplo, compraste el portátil o el smartphone en Fnac o Mediamarkt, te en cuenta que ambas tiendan mantienen en activo tanto el servicio posventa como el servicio de atención al cliente de forma telefónica. “Los repartidores llevarán guantes y mantendrán la distancia de seguridad, además de dejar los paquetes en la puerta de casa”, señalan desde la cuenta oficial de Twitter de MediaMarkt.

En cualquier caso, todas las compañías seguirán las recomendaciones emitidas por el Ministerio de Sanidad en cuanto a seguridad. Es decir, si finalmente acuden a tu domicilio deberán llevar guantes y mascarilla para evitar cualquier tipo de contagio. ¿Estas normas se pueden aplicar al resto de electrodomésticos? La respuesta es así. Las lavadoras, las neveras, las televisiones... Los técnicos seguirán prestando sus servicios a pesar de la cuarentena.

¿Y si el ordenador o el móvil es de empresa?

En ese caso, lo mejor es llamar al servicio técnico de tu compañía y que sean ellos los que gestionen el problema con la aseguradora.