Tecnología

Apple comienza a desarrollar sus propios microchips. Estas serán las consecuencias

El anuncio se hará en menos de dos semanas, en la conferencia de desarrolladores

FILE PHOTO: Customers walk past an Apple logo inside of an Apple store at Grand Central Station in New York
El CNI alerta: no uses Siri, el asistente virtual de AppleLucas JacksonReuters

El 2010 fue un año muy especial para Apple. Fue entonces cuando lanzó su primer iPad, tenía una enorme variedad de productos en el mercado, desde el iPhone 3 y el 4, hasta el iPod Touch, el Shuffle, el Nano, Apple TV era relativamente nueva (apenas un año en el mercado)…Y a eso le sumaba varias opciones de portátiles. Pero hay algo más: ese año Apple construyó su primer chip propio, el A4.

Ahora, una década después, Apple da otro giro similar y comenzará a crear sus propios microchips, ahora para sus ordenadores. Esto, que era una secreto a voces, significa que Apple dejaría de asociarse a Intel, con quien trabajaba desde 2005.

Obviamente un movimiento como este traerá muchas consecuencias. La primera y más inmediata, es que Intel se verá perjudicada. En 2019 Apple vendió ordenadores y portátiles por un valor de 47.000 millones de euros, lo que convirtió a la compañía en el mayor fabricante (o al menos el que más facturó) a nivel mundial. Las ventas totales de iPad y Mac en el trimestre superaron los 11.000 millones de euros, por encima de los 9.700 de HP, los 9.600 de Lenovo y muy lejos de Microsoft, con “apenas” mil millones. De este modo Intel pierde a uno de sus principales socios comerciales con este movimiento.

Dispositivos a medida

En la otra cara de la moneda, Apple podrá usar sus propios microchips para diseñar dispositivos a medida. Portátiles más delgados, con materiales más ligeros y sistemas de ventilación más eficientes. Podrá experimentar con baterías, sistemas de construcción en una sola pieza y teclados con más cualidades buscadas por los usuarios. De acuerdo con la información conocida hasta la fecha, los responsables del diseño serán los mismos que hacen la base de los microchips que utiliza Samsung, Qualcomm y Nvidia, la firma japonesa Arm.

En pocas palabras, el paso de Apple podría ser el empujón que buscaba la marca de la manzana para llevar a cabo un cambio radical en el diseño de sus dispositivos al tiempo que les da unas nuevas prestaciones y materiales distintivos.