Televisión

La actuación de Estrella Morente en “Operación Triunfo” generó 1.565 quejas ante el Defensor de la Audiencia de TVE

Según un informe que ha recogido Europa Press, la cadena pública ha recibido casi 2.000 quejas de espectadores relacionadas con el “talent”

“Operación Triunfo 2020″ finalizaba el pasado miércoles con Nia como ganadora de la edición y cerrando tras unos meses complicados. El programa ha sido, desde su comienzo en enero, foco de atención en las redes sociales por numerosas polémicas que se han desatado dentro y fuera de la Academia. El espacio, además de haber afrontado con entereza y esfuerzo una complicación en su transcurso como ha sido la paralización de dos meses por el coronavirus, no ha pasado desapercibido en la parrilla televisiva. Y menos aún cuando nos referimos al debate que desató la actuación de Estrella Morente en el plató del programa.

El Defensor de la Audiencia de RTVE, Ángel Nodal, ha recibido casi 2.000 quejas de espectadores relacionadas con “Operación Triunfo”, de las que un total de 1.565 se refirieron a la actuación de Estrella Morente, quien hizo un alegato a favor de la tauromaquia contestando a las declaraciones que había hecho una concursante del talent musical. Así lo refleja el primer informe trimestral de 2020, según expone Europa Press, que muestra que de enero a marzo la Oficina del Defensor ha recibido 3.631 quejas, frente a las 1.252 del mismo periodo del año anterior, lo que supone 2.379 más.

“Durante la actuación de Estrella Morente con Nia, la artista invitada ha hecho un alegato a favor de la tauromaquia contestando a las declaraciones que había hecho una concursante ajena a todo lo acontecido en el exterior, descolocando a su compañera de actuación y faltando al respeto a gran parte de la audiencia que considera que ‘Operación Triunfo’ no es lugar para hacer alegatos a favor de la tauromaquia”, explicaba Roberto en su queja, en que exigía explicaciones y disculpas a TVE, Gestmusic y al propio programa.

La directora de la Academia, Noemí Galera, respondió que “TVE ni ha participado ni fue informada, en ningún momento, de lo que finalmente ocurrió”, mientras que el Defensor de la Audiencia cree que lo ocurrido “supone una descortesía y una falta de respeto profesional a TVE”. Asimismo, Nodal considera que se actuó “correctamente” al no cortar la interpretación, “como han pedido muchas de las personas” que le han trasladado su queja, “pues se habría convertido en un acto de censura injustificable”.

“Nazis, psicópatas y gilipollas”

Junto a la actuación de Morente, otros temas relacionados con “OT 2O2O” fueron los comentarios antitaurinos por parte de Maialen, una de las concursantes (286 quejas), así como la charla sobre feminismo impartida en la academia por una periodista (70) y el lenguaje vulgar que utilizan tanto concursantes como profesores y críticas a un miembro del jurado. Cerca de trescientas personas y la Asociación del Toro de Lidia se quejaron de que una concursante llamara “nazis, psicópatas y gilipollas” a los aficionados a los toros.

“El tono de los comentarios realizados por la concursante, contra los aficionados a los toros, son opiniones personales que no compartimos”, aseguró la Dirección de Entretenimiento de TVE, que añadió que la cadena “está obligada a defender la pluralidad y la libertad de expresión”. En este caso, el Defensor cree que, “aunque no se trata de un programa de opinión, los participantes en cualquier espacio de RTVE están sujetos a las normas y manuales que regulan el funcionamiento de la televisión de todos”. Respecto a la libertad de expresión, recuerda que el libro de estilo “deja bien claro” que “la libertad de expresión no ampara, en ninguna circunstancia, el uso de expresiones insultantes, insinuaciones insidiosas, injuriosas o vejatorias”.

El pasado jueves, tras la final de “OT 2020”, Nia se pronunció por primera vez acerca del escándalo que ella vivió de primera mano. “Cuando la conocí me pareció muy maja (Morente), pero me sorprendió que de repente comenzara a cantar otra canción”, explica la concursante. “Es verdad que ella me comentó que iba a hacer algo para calentar y le dije que no me importaba, pensaba que iba a hacer uno de sus quejíos, pero cuando empezó la canción era otra y yo me asusté, porque el flamenco no es lo mío y no estaba entendiendo nada”, expresa. “Cuando vi la que se formó dije, madre mía, porque no era el momento ni el lugar”.