Bruselas reacciona

¿Son Google y Meta un duopolio que amenaza la competencia?

La Comisión Europea ha abierto una investigación contra los dos gigantes de la comunicación sobre un acuerdo de 2018

Fotografía visitantes tomándose una foto con el logo de "META" en Menlo Park, California, (EE. UU).
Fotografía visitantes tomándose una foto con el logo de "META" en Menlo Park, California, (EE. UU).JOHN G. MABANGLOAgencia EFE

Recientemente se conocía que la Comisión Europea de la competencia investiga a dos de los gigantes de la comunicación mundial por un abuso sobre la competencia en el mercado de la publicidad en medios digitales. Esta coyuntura amenazaba a la inmensa mayoría de editores y a las plataformas competidoras, excluyéndolas del pacto firmado entre Google y Meta (antes Facebook) en el año 2018. En su momento Google echaba balones fuera: «Es un acuerdo que favorece la competencia y que permite a Facebook Audience Network (FAN) participar en nuestro programa Open Bidding, junto con docenas de compañías». Más detalladamente, este «Jedi blue» (como se conoce internacionalmente este pacto) consiste en la participación de la Red de Audiencia de Meta en el programa de administración de anuncios publicitarios en línea «Open Bidding» de Google.

Cuatro años más tarde de este acuerdo es evidente que la reacción de Bruselas no ha sido la más rápida, de hecho, lo demuestran las demandas que interpusieron a Google diez estados de EEUU el pasado año por este mismo motivo. Dichas reclamaciones acusaban a ambas multinacionales de esconder un duopolio ilegítimo que ponía en riesgo la competencia en todo el sector editorial y que perjudicaba al consumidor.

A la reacción norteamericana se sumaba recientemente la británica. La Autoridad de Mercado de la Competencia del Reino Unido (CMA) también estudia medidas para frenar este duopolio que «estrangula la competencia». De hecho, la CMA ya colabora en esta investigación con la institución de Bruselas.

Aunque haya tardado en hacerlo, la respuesta de la CE ha sido contundente, a través de su vicepresidenta Margrethe Vestarger: «Muchos editores dependen de la publicidad gráfica en línea para financiar sus contenidos. A través del llamado ‘Jedi Blue’ una tecnología competidora del Open Bidding de Google puede haber sido atacada con el objetivo de debilitarla y excluirla del mercado de visualización de anuncios en los sitios web y aplicaciones de los editores». Vestarger añade que de cumplirse esta hipótesis «se estaría restringiendo y distorsionando la competencia en el ya concentrado mercado de la tecnología publicitaria, en detrimento de las tecnologías publicitarias rivales, de los editores y, en última instancia, de los consumidores».

Para quien no la conozca en profundidad, Meta presta servicios de publicidad gráfica en línea y, a través de su «Meta Audience Network», participa en subastas de espacios publicitarios de terceros editores utilizando los servicios de tecnología publicitaria de Google, como Open Bidding, y de sus rivales. De esta forma, si se demuestra que se están cometiendo las prácticas investigadas, estarían infringiendo las normas de competencia de la Unión Europea sobre acuerdos anticompetitivos entre empresas.

Por el volumen de información a procesar, se estima que está investigación podría durar años, dado que además «no existe un plazo legal para poner fin a una investigación antimonopolio, sino que depende de multitud de factores». Aun así, este no es el primer conflicto entre Europa y Google. La CE ya multó a la multinacional hace años por un valor de 8.000 millones de euros.

La noticia de la investigaciónsaltaba en plena vorágine informativa sobre Meta; solo unos días después Rusia, en pleno conflicto, la tachaba de «extremista». Mientras, Meta trabaja ya en el cuarto centro de datos de Europa, en Talavera.