Antena 3

La sinceridad de José Andrés en “El Hormiguero”: “Me caen lágrimas de impotencia”

El afamado chef se sentó en el programa de Pablo Motos para contestar a preguntas gastronómicas y humanitarias

José Andrés en un momento del programa
José Andrés en un momento del programaEL HormigueroAntena 3

“No solo de pan vive el hombre”. Esta cita bíblica de Jesús se puede aplicar sin miedo, y en un sentido, al chef español José Andrés, creador de la ONG World Central Kitchen que recientemente ha estado alimentando a los desplazados y afectados por la invasión de Ucrania por Rusia. El asturiano ha hablado de todos los temas relacionados con su trabajo, su labor humanitaria y los momentos de frustración asociados a la guerra y los desastres naturales.

Quizá la actualidad del conflicto en Ucrania ha marcado gran parte de la entrevista, en la que Motos desveló que la ONG repartió más de 30 millones de kilos de comida, transportado más de 4 millones de kilos de alimentos, una red de más de 440 cocinas, restaurantes implicados, más de 2.400 puntos de distribución y asistieron a más de 100 campos de refugiados... El presentador quiso saber por qué “no lo llamas trabajo, si no que dices que es una llamada...”. El chef ha explicado que “en muchos momentos de emergencia sobre todo en el lugar cerca de donde yo vivo, los huracanes en Estados Unidos, lo que pasó en Katrina y que te dabas cuenta que muchas veces, la gente se quedaba totalmente desprotegida y algo que era tan fácil como que después del destrozo, algo como la comida no les falte, pensé que la gente que sabe dar de comer, que somos los cocineros, el mundo de los restaurantes, nos teníamos que unir y activarnos para resolver ese problema en mitad de la emergencia”. Así relató que durante la crisis en Haití, “no fui a ayudar, fui realmente a aprender; a ver sobre el terreno qué se podía hacer”.

Pablo Motos quiso saber el calado de las situaciones que vive el cocinero en su labor humanitaria y le preguntó si esos momentos le hacen llorar. “Sí, yo en ese sentido si que me caen lágrimas. A veces de impotencia, de ver lo que la gente está sufriendo, de ver que yo estoy regresando a mi habitación de hotel y no voy a volver hasta el día siguiente y por ejemplo, sigue lloviendo”, confiesa el chef que habló del ejemplo de Bahamas cuando “aterrizamos y llevábamos comida, pero quien se quedó allí fue Sam. Iba a ver lo que sucedía para luego comunicarse a través de un satélite para saber lo que yo tenía que seguir trayendo al día siguiente. Un helicóptero no era suficiente porque no era solamente una isla si no otras pequeñas 14 islas. Tuvimos que conseguir unos 5 helicópteros más que hacían unos 18 vuelos al día llevando toda esa comida para que pudiéramos montar 30 días después loa primera cocina. Lo que hacemos es simplemente adaptarnos”. Cada una de las respuestas del chef iba acompañada de una salva de aplausos del público que reconoce la labor del José Andrés.

Bromeó Motos con que “me van a matar los de Disney +” en referencia a descubrir detalles de lo que contará el documental del gigante del streaming dedicado a la labor del chef y que se llamará “Alimentando el mundo”. El chef aprovechó para tranquilizar al presentador: “no te preocupes, yo conozco a Mickey Mouse, yo le llamo... y le digo que me perdone”.

El programa deparó otros grandes momentos como cuando el chef se ofreció a cocinar una paella para el público del plató en la pausa de publicidad: Tienen hambre”, bromeó. También se atrevió a contestar la gran cuestión de “quién paga todo esto” en referencia a su labor con la ONG, y que el chef reconoció como “una infraestructura bastante grande pero siempre nos hemos financiado a través del apoyo de las personas; en Estados Unidos siempre nos han apoyado mucho, hacemos muchos vídeos por la razón fundamental de que a la gen te le gusta saber qué s lo que está sucediendo. Y sobre todo les gusta ver organizaciones, que en tiempo real están intentando solucionar un problema”.

En un momento confesó haber suspendido ingles en la escuela y “ahora hablo inglés”. Desveló que aprendió inglés “con canciones de Supertramp en un cassete, luego con un cd y leía el librito y aprendí inglés cantando”.