First Dates
Ni la edad ni la apariencia: la cruel acusación que un soltero de First Dates ocultó durante toda la cena
La historia de Mar y Carlos supuso un desencuentro generacional luego de una cita marcada por la falta de honestidad
Mar, una profesora de Vigo de 57 años, y Carlos, un director de transformación digital de 56, protagonizaron un episodio revelador en First Dates, el programa de citas de Cuatro.
La soltera llegó al programa con la ilusión de encontrar compañía tras años dedicados a la crianza de sus dos hijos adoptivos. Su objetivo era superar el "síndrome del nido vacío" y conocer a alguien con quien compartir su vida, evitando específicamente a ingenieros debido a su experiencia matrimonial previa.
Durante la cena, Mar mostró comodidad y cercanía. El presentador Carlos Sobera incluso percibió una química inicial entre los comensales, una impresión que contrastaba radicalmente con lo que sucedería después.
Un encuentro marcado por las expectativas distintas
Carlos reveló en los confesionales una perspectiva completamente diferente. Criticó duramente la apariencia física de Mar, calificándola de "mayor" y declarando que no cumplía con sus "estándares". Sus comentarios fueron especialmente duros, tachando incluso la búsqueda de pareja de Mar como una actitud "ventajista".
La audiencia no tardó en manifestar su descontento. En X, los usuarios criticaron severamente la actitud de Carlos, calificándolo de "imbécil" y señalando su falta total de empatía.
Los comentarios se multiplicaron, poniendo de manifiesto el rechazo generalizado hacia el comportamiento del soltero. La comunidad online no solo defendió a Mar, sino que también expuso la crueldad de los juicios superficiales en los programas de citas.
El episodio reveló dos dinámicas importantes en los formatos de citas televisivos. Por un lado, la brecha entre lo que se muestra en público y lo que se confiesa en privado; por otro, el poder de las redes sociales para amplificar y juzgar comportamientos.
Mar representaba la vulnerabilidad y la esperanza de encontrar compañía, mientras que Carlos encarnaba una visión extremadamente selectiva y poco empática del encuentro romántico.