El regreso de "Lo de Évole" a laSexta no dejó a nadie indiferente, y menos cuando su invitado, Juan y Medio, transformó una aparente confesión en una broma que descolocó por completo a Jordi Évole y a toda la audiencia. La entrevista, que inauguró la sexta temporada del programa, exploró la vida del carismático presentador andaluz, conocido por su largo recorrido en televisión y su habilidad para conectar con el público.

Entre anécdotas de su trayectoria profesional y reflexiones sobre la soledad y la vejez, Juan y Medio soltó una bomba inesperada: aseguró tener una relación telefónica con el rey emérito, Juan Carlos I. Según relató, el monarca había llamado en alguna ocasión interesado en una persona que apareció en su programa "La tarde, aquí y ahora", emitido por la televisión autonómica andaluza. Évole, sorprendido, no pudo contener su asombro mientras Juan y Medio detallaba cómo el rey se sentía solo en el extranjero, rodeado de gente por conveniencia más que por afecto.

La cúspide del momento llegó cuando Évole pidió a su invitado que llamara al monarca en directo. Juan y Medio accedió, sacó su teléfono y marcó, pero nadie respondió. Sin embargo, momentos después, el aparato sonó y el presentador pidió silencio absoluto mientras fingía una conversación con alguien al otro lado. Pero lo que parecía ser un momento histórico acabó con un giro inesperado cuando Évole tomó el teléfono y escuchó la inconfundible melodía de "Inocente, inocente".

El plató estalló en risas, y Juan y Medio aclaró que todo había sido un montaje elaborado con la complicidad del equipo del programa. “Ya podéis pasar por el finiquito”, bromeó Évole tras el desenlace de la broma, que dejó claro por qué Juan y Medio sigue siendo un maestro del entretenimiento.

La entrevista, además de incluir momentos de humor, abordó temas más profundos, como los desafíos emocionales de las personas mayores en España y los conflictos familiares que suelen surgir en torno a ellos. Con su particular estilo, Juan y Medio puso sobre la mesa realidades incómodas, como la desconfianza hacia los mayores en el seno de sus propias familias.

Así, el regreso de "Lo de Évole" dejó un cóctel perfecto de risas, reflexiones y momentos inolvidables, confirmando por qué el programa sigue siendo un referente de la televisión actual.