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Mejor que 'Cisne negro' con Natalie Portman: la mejor obra maestra sobre la obsesión está en Netflix

Un conflicto a ritmo de jazz, donde el talento no basta y la perfección exige sangre, sudor y lágrimas

Natalie Portman hizo una interpretación inolvidable en 'Cisne negro' Difoosion

Si realmente creías que Cisne negro era la cumbre cinematográfica absoluta sobre la obsesión y lo que significa la autoexigencia, eso es porque todavía no habías visto Whiplash. Esta película no solo es una joya que podría igualarla, sino que, para muchos, supera la cinta de Darren Aronofsky. Disponible en Netflix, esta obra maestra que fue dirigida por Damien Chazelle es un retrato crudo sobre lo que significa querer ser el mejor a cualquier costo.

Whiplash cuenta la historia de un joven Andrew Neiman que destaca por su ambición y fuerte convicción. Un baterista de jazz con un talento innato, hambre de grandeza y muy poca tolerancia al fracaso. En su camino para conseguir el éxito aparece Terence Fletcher, un profesor de música tan carismático como despiadado, que convierte cada clase en una contienda en la que cualquier cosa puede pasar.

Un retrato extremo de la obsesión por la perfección

Lo cierto es que la película va bastante al grano, por lo que no hay tiempo para clichés. El sufrimiento parece real con cada nota y el sudor que conlleva el esfuerzo de intentar ser el mejor se hace notar en cada escena. Por supuesto, la música, lejos de ser un simple adorno que acompaña al metraje, es el campo de batalla donde se libra esa guerra por alcanzar la perfección.

Lo que hace única a Whiplash es su ritmo tan acertado. La cinta es capaz de llevarte por un camino en el que se acelera y desacelera la acción constantemente hasta llegar a una secuencia final que te deja sin aliento. Y es que no es solo una película sobre música. Es una historia que aborda la obsesión más absoluta, el sacrificio y los límites difusos entre la pasión por lo que te gusta y la autodestrucción por intentar ser el mejor.

Y aunque parezca irónico, Whiplash no trata de glorificar el abuso que se produce en esta extraña simbiosis entre mentor y alumno que solo busca alcanzar la excelencia musical. Es una película que realmente nos hace preguntarnos si realmente vale la pena llegar tan lejos por ser una leyenda. Las actuaciones son otro de sus puntos fuertes. J.K. Simmons hace una actuación verdaderamente brutal, una que le valió hacerse con un Premio Oscar. Miles Teller también está sensacional como el protagonista principal.

No tengo ninguna duda de que Whiplash es un puñetazo emocional que merece toda tu atención. Si te gustó Cisne negro, aquí encontrarás otra cara de la misma moneda que posiblemente sientas mucho más real. Si no la has visto, te estás perdiendo una auténtica obra maestra.