El sino español:sufrir hasta la victoria final

Madrid- España ha superado con notable alto la primera fase de la Eurocopa y en el partido definitivo «los jugadores ni se han abrazado», como resalta Del Bosque. Tan malo es caer en la primera ronda como no valorar en su justa medida el éxito al dejarla triunfalmente atrás. El empate contra la Italia más atrevida de los últimos años fue considerado un ligero fiasco; el rutilante y corto 4-0 a Irlanda, una goleada obligatoria, y el apretado triunfo frente a Croacia, casi un desastre. Quizá «La Roja» no ha transmitido las mejores vibraciones, pero ha superado el examen como lo hacen los campeones, como antes ni siquiera soñaba porque la mala suerte, los postes, el árbitro o el vaya usted a saber la desterraban.

 La Italia que temió por su suerte, porque España y Croacia fueran a cocinar un «biscotto», sólo fue capaz de ganar 2-0 a Irlanda por remates en sendos córners. «La Roja» achicharró a los irlandeses. Si Croacia hubiera empatado el lunes, sólo los italianos serían culpables de su infortunio. Y los croatas plantearon un partido monumental, con una defensa sin fisuras, bloquearon el juego español, evitaron que profundizara y desactivaron a sus cerebros. Sólo cuando se supieron perdidos descuidaron la defensa y lo pagaron. España ganó a un gran equipo; pero no brilló, cierto es.

Terminada la primera fase, resulta que los cambios introducidos por el seleccionador en cada partido han sido positivos y que su equipo ha culminado la liguilla primero en todo y sólo por detrás de Alemania en la clasificación por puntos: 9 a 7. Sólo ha adolecido, fundamentalmente en el encuentro con los croatas, del fútbol rutilante que le caracteriza, ése que ha deslumbrado al mundo entero y que, de momento, reserva, quizá, para lo que resta de torneo, lo más emocionante.

En la Eurocopa de 2008, la del despegue de esta espléndida generación, los problemas empezaron en el segundo partido, al ganar 2-1 a Suecia con un tanto de Villa en el minuto 93. Ganaba, se dejó empatar, mostró su peor cara, defensiva y ofensiva, y terminó por imponerse gracias a la fe del «Guaje». Con el equipo reserva venció 2-1 a Grecia, y en cuartos eliminó a Italia, por fin, en la tanda de penaltis, con Casillas, sobre todo, y Cesc elevados a los altares. Goleada a Rusia en semifinales (3-0) y corto triunfo sobre Alemania en la final con el solitario e histórico tanto de Torres.

Se sufrió en la Eurocopa de Austria y Suiza, como se sufre en la de Polonia y Ucrania. Como se padecerá el sábado y después, de entrar en «semis», contra Portugal, posiblemente. Esta selección tiene menos fútbol que la española, pero más físico; parece más fuerte y será preciso evitar que a Cristiano Ronaldo le salga un partido, como en Suráfrica.

En el Mundial, revolcón en agua helada, para empezar. Suiza abrió un hueco entre la dominación española y le bastó. Tras la derrota, victoria sobre Honduras (2-0). A continuación Chile, una pesadilla que no se dejó amedrentar hasta que se quedó con 10, por la justa expulsión de Estrada cuando España ya ganaba 2-0 con más acierto que fútbol. En octavos, lección a Portugal, pero sólo por 1-0, como a Paraguay en cuartos, a Alemania en semifinales y a Holanda en la final. En siete partidos, «La Roja» hizo 8 goles y recibió 2. Perdió un encuentro por la mínima y, excepto a Honduras, ganó con lo justo. Sufrió España en las dos citas anteriores hasta la victoria final; en ésta, ojalá que le suceda algo parecido.

España, líder en ataque y defensa
Dicho está que sólo Alemania mejora a España en un capítulo que no ha sido trascendental en la clasificación. El equipo de Joachim Löw ha sumado 9 puntos en la fase preliminar y el de Vicente del Bosque, 7, por el empate con los italianos. «La Roja» copa los primeros puestos del resto de clasificaciones. Completados todos los partidos de la primera fase, es la máxima goleadora, con 6 tantos; la menos goleada, con uno, un 0,33%; la que más ha disparado a puerta, 39 veces; la que más pases ha dado, 2.411; la que más tiempo ha tenido el balón en su poder, 62%, y la que más córners ha sacado, 26. Estos números tienen que ser significativos, a la fuerza; aunque le haya faltado inspiración contra Italia y, sobre todo, ante Croacia, la muralla de la Eurocopa.