Conferencia de Embajadores
El Gobierno pide a los embajadores que trabajen para que el catalán, el gallego y el euskera sean incluidas como lenguas cooficiales en Europa
El jefe de la diplomacia española les reclama que lleven "con orgullo" la riqueza lingüística española
Bajo el lema #DiplomaciaParaLaPaz, el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, ha participado en la inauguración de la VIII Conferencia de Embajadores, en la sede del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación. El jefe de la diplomacia española ha destacado que el Gobierno de España tiene una posición “activa y líder” en el ámbito internacional reconocida por nuestros socios y aliados en el mundo. “Nuestra voz se escucha en Bruselas, en Washington y en Pekín. Tenemos españoles ostentando cargos vitales en la arquitectura europea e internacional. Todo esto tiene un impacto positivo y muy directo en el bienestar de los españoles. Sigamos en esta senda en 2024”, ha subrayado el jefe de la diplomacia española, ante 129 embajadores.
Durante su alocución, Albares ha pedido expresamente al cuerpo diplomático que “trabaje” para el catalán, el gallego y el euskera —lenguas cooficiales de nuestro país— sean incluidas como lenguas oficiales de la Unión. “España tiene una riqueza lingüística que merece ser acogida y recogida en la Unión Europea porque es nuestra identidad y nuestro interés nacional”, ha subrayado.
De este modo, el Gobierno insiste en el peaje a Junts por su apoyo en la investidura de Pedro Sánchez. Ya durante la presidencia española de la Unión Europea, el ministro de Exteriores hizo suya esta reclamación de los independentistas y llevó a Bruselas la propuesta que finalmente fue aplazada porque no contó con el voto a favor de los 27. Entre los principales motivos está el elevado coste que supone meter tres lenguas de golpe en las instituciones europeas.
No en vano, Implantar como lenguas oficiales en la Unión Europea el catalán, el euskera y el gallego, como ha reclamado España, costaría al menos 132 millones de euros al año, según un informe de la Comisión Europea solicitado por el Gobierno de Pedro Sánchez para impulsar en el club comunitario las lenguas cooficiales españolas.
El principal objetivo del encuentro, es el análisis y debate de las prioridades y líneas principales de nuestra política exterior en los próximos años en el arranque de la legislatura así como poner en valor las lecciones y los resultados de la Presidencia del Consejo de la UE que se cerró el 31 de diciembre.
En este sentido, el ministro de Exteriores ha insistido en que España siempre ha destacado por la fortaleza de nuestro europeísmo, “siempre hemos llevado a Europa en el corazón, ahora más que nunca podemos decir que también estamos en el corazón de Europa”, ha dicho para después señalar que tenemos más presencia y liderazgo que nunca. No solo por nuestra exitosa presidencia, sino por liderazgos como el de Josep Borrell como Alto Representante y Vicepresidente de la Comisión al frente del Servicio Exterior de la UE, de Nadia Calviño como Presidenta del Banco Europeo de Inversiones o de José Manuel Campa como Presidente de la Autoridad Bancaria Europea.
A renglón seguido, ha insistido en que en un mundo en el que aumentan los conflictos, "el papel de la diplomacia debe ensancharse". En este tiempo de cambios, ha dicho, "no basta con una diplomacia reactiva, necesitamos y practicamos una diplomacia activa, propositiva, anticipativa, aportando ideas, promoviendo iniciativas económicas, políticas, culturales".
Defensor multilateralismo
El ministro de Exteriores ha subrayado que "los retos globales se multiplican y el multilateralismo es la respuesta". Es por ello, que ha reclamado que la diplomacia española actúe para "preservar y reforzar un orden multilateral que es cada vez más un imperativo político y vital" y ha anunciado que con esa vocación multilateral "hemos presentado nuestra candidatura al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas para el período 2025-2027" y ha pedido al cuerpo diplomático que "trabaje activamente" para defenderla.
Antes de finalizar su discurso, Albares hizo referencia a la misión de proteger a los compatriotas españoles de los embajadores españoles en el mundo. En este sentido, se refirió a la Embajada de España en Irán, y a su embajador, a quienes agradeció "su magnífica labor" para que Ana Baneira y Santiago Sánchez, injustamente retenidos en Irán, fuesen liberados y estén ya en España con sus familias y seres queridos.
Sánchez, al cuerpo diplomático: “Os pido que mostréis un país que defiende el orden internacional basado en reglas”
El Jefe del Ejecutivo ha pedido al cuerpo diplomático que “su máximo esfuerzo” para proyectar la imagen de “un país que se niega a abrazar a la ultraderecha”. Les ha instado a que se esfuercen por “mostrar” una España que defiende la universalidad de los derechos humanos; el orden internacional basado en reglas, que apuesta por la paz y solidaridad y que hace de la bandera de la igualdad de géneros una de sus principales tareas en el ámbito exterior.
El jefe del Ejecutivo ha hecho esta petición durante el tradicional encuentro con los embajadores que marca el inicio de curso y que ha servido al jefe del ejecutivo para desgranar los principales objetivos de la acción exterior española. Ha querido, el presidente del Gobierno arrancar su discurso con un análisis del contexto internacional poniendo el acento en la incertidumbre, la erosión creciente y la polarización “como consecuencias del auge de formaciones ultras dispuestas a romper modelos de convivencia”. Situando a estas formaciones como las que están poniendo en jaque a la democracia, el presidente ha pedido a los embajadores que defiendan la postura España.
Antes de dirigirse al Senado, donde se votarán los tres decretos del Ejecutivo, Sánchez ha sacado pecho de la convivencia en Cataluña ha dicho “que hoy podemos exhibir cómo la convivencia se abre paso”, en referencia a la situación hace una década cuando, según sus palabra, estaba quebrada.
A renglón seguido, el Jefe del Ejecutivo ha enumerados los objetivos de la acción exterior de cara al próximo curso. En este sentido, ha subrayado el “manantial de europeísmo que es España” haciendo una mención expresa al apoyo del proceso de integración de la Unión Europea. En este sentido, el Jefe del Ejecutivo ha insistido en que la presidencia del Consejo de la UE ha contribuido a la unidad europea, uno de los principales eje de la Política Exterior española.
Se ha referido de la interlocución con EE UU y China, las dos principales potencias mundiales de las que ha puesto en valor la buena relación con ambos países. Sobre América Latina, el presidente Sánchez ha destacado que existen “vínculos que nos unen y dinamizan esa relación” y ha anunciado su intención de viajar durante esta legislatura a Japón, India, Australia y Mauritania.
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