América Latina

Población indígena de Guatemala acusa a su presidente de discriminación

Organizaciones indígenas declararon no grato en sus territorios al presidente Alejandro Giammattei, luego de un choque de opiniones sobre las ayudas ofrecidas por el gobierno por la pandemia

Presidente de Honduras y su esposa contagiados con COVID-19
AME1923. CIUDAD DE GUATEMALA (GUATEMALA), 14/01/2020.- Fotografía de archivo fechada el 14 de enero de 2020 que muestra al presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, y su esposa, Ana García Carías, mientras asisten al acto de investidura del nuevo presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei, celebrado en el Teatro Nacional en Ciudad de Guatemala (Guatemala). El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, anunció este martes que contrajo la COVID-19, lo mismo que su esposa, Ana García, pero que se siente con la suficiente fuerza para superar la enfermedad. EFE/Esteban BibaESTEBAN BIBAEFE

(AP). Organizaciones de indígenas guatemaltecos declararon no grato en sus territorios al presidente Alejandro Giammattei, acusándolo de racismo y discriminación, luego de un choque de opiniones sobre las ayudas ofrecidas por el gobierno en medio de la pandemia y los mega proyectos extractivos que afectan a los territorios indígenas.

En días pasados el presidente se reunió con autoridades indígenas en los departamentos de Sololá, Quiché y Chimaltenango para tratar temas locales. Fue en una reunión del 17 de julio en San Juan Comalapa, de Chimaltenango cuando Giammattei tuvo diferencias con las organizaciones, quienes le reclamaron que las ayudas estatales prometidas por la pandemia no han llegado a los más necesitados.

“Usted ya apoyó a los empresarios, pero a los pobres ¿cuándo?”, le expresó uno de los asistentes a la reunión con el presidente.

El reclamo también fue por el apoyo de gobierno a los proyectos mineros que afectan a los territorios pobres e indígenas, le dijeron. Fue entonces que el presidente interrumpió y dijo: “Yo vine aquí al diálogo y no a oír una sarta de inconsistencias”.

Dos días después de las discusiones, Giammattei ordenó un estado de sitio en cinco municipios de los departamentos de Izabal y Alta Verapaz, algunos colindantes con una mina operada por la Compañía Guatemalteca de Níquel, que fue suspendida de sus operaciones por la Corte de Constitucionalidad aduciendo que en el lugar había grupos criminales que estaban cometiendo ilegalidades y accionando contra autoridades, afectando la propiedad privada y las comunidades.

El miércoles y jueves las organizaciones que aglutinan a más de 50 colectivos indígenas hicieron públicas dos cartas en las que declaraban non grato a Giammattei en sus territorios, diciéndole que ante los reclamos de autoridades indígenas de San Juan Comalapa “no se hizo esperar su exaltación, cual si fuera un capataz y esbirro de la época colonial, con látigo en mano para acallar a la autoridad indígena que estaba en el debido y uso de la palabra”.

Las organizaciones aseguran que el presidente demostró que no llegó a escucharlos ni atenderlos, sino a fortalecer el estado racista y discriminador.

El grupo dijo que de los 18 millones de habitantes en el país, según cifra oficial, él obtuvo 1.9 millones de votos en su elección, por lo que también deben ser escuchados quienes no votaron por él. “Usted no acepta que en el país cohabitamos una diversidad de formas de entender la vida” le expusieron.

En un boletín de prensa, la Secretaría de Comunicación del presidente dijo el jueves que “Su gobierno está comprometido en apoyar las demandas de los pueblos mayas”, y que ha escuchado las peticiones de las autoridades de los pueblos originarios.

“El Presidente Alejandro Giammattei continúa apegado a sus principios dentro de su Política General de Gobierno, en la que resalta garantizar los derechos humanos, acabar con todo tipo discriminación, especialmente contra los pueblos indígenas y las mujeres, y la falta de respuesta a sus demandas sociales”, dice el comunicado.

Las autoridades indígenas también demandaron a la fiscalía iniciar una investigación de oficio contra el presidente por delitos de abuso de autoridad, racismo y discriminación. No descartaron realizar más acciones para manifestar su descontento.