Paro

Las dos caras de la economía andaluza: sube el paro en enero mientras crece el PIB

El número de desempleados se incrementó en 28.156 el mes pasado, encabezando el aumento a nivel nacional. La Junta achaca este dato a la subida del Salario Mínimo Interprofesional

Una oficina del Servicio Andaluz de Empleo (SAE)
Una oficina del Servicio Andaluz de Empleo (SAE)Manuel OlmedoLa Razón

La economía andaluza muestra sus dos caras: el Producto Interior Bruto (PIB) experimenta un comportamiento favorable, mientras que una de las debilidades endémicas de la comunidad autónoma, el desempleo, creció en enero, tanto que encabezó la subida nacional. En concreto, el número de parados subió el mes pasado en 28.156 personas, lo que supone un incremento del 3,62 por ciento respecto al mes anterior. La cifra total de desempleados se sitúa en 806.090.

En términos interanuales, en cambio, el paro descendió en 2.673 personas en el primer mes del año, lo que representa una bajada del 0,33 por ciento respecto al mismo mes del año anterior. El sector servicios fue el que más elevó en Andalucía el número de parados, con un aumento de 26.037 desempleados, seguido de la agricultura, con 6.390 parados más, y la industria (940). Por el contrario, el desempleo descendió en la construcción, con 4.098 parados menos; y el colectivo sin empleo anterior, que restó 1.113 desempleados.

De otro lado, la afiliación media a la Seguridad Social bajó en 40.148 ocupados en enero en relación con la media del mes anterior, con lo que se situó en 3.135.224. Con respecto a la contratación. En lo que respecta a la contratación, ascendió a 475.207 contratos, de los que 453.949 fueron temporales, el 95,5 por ciento del total, y el resto, 21.258, fueron indefinidos, el 4,5 por ciento del total. La Junta atribuyó esta subida del desempleo al aumento del Salario Mínimo Interprofesional (SMI). La consejera de Empleo, Rocío Blanco, aseguró que el mercado laboral «no es capaz de asumir un 22 por ciento de incremento del SMI del año anterior y 5,5 por ciento este año, sobre todo en la agricultura y en los trabajos con menor nivel productivo». Blanco consideró que quizá una industria con «gran capacidad productiva es capaz de absorberlo pero no una tiendecita en un pueblo de mil habitantes o en mercantiles o centros de trabajo con menor incremento de la productividad». La agricultura es uno de los afectados principalmente, dijo, al igual que el sistema de empleados de hogar, «donde está habiendo muchos despidos».

Por su parte, el vicepresidente de la Junta, Juan Marín, valoró la bajada interanual del paro, especialmente el hecho de que el colectivo sin empleo anterior restó 1.113 desempleados en enero, algo que «quizás tenga mucho que ver con el incremento del número de autónomos y emprendedores», lo que «refuerza» las políticas de empleo que están llevando a cabo.

Contrariamente, el dato del PIB con el que se cerró 2019 ofrece motivos para el optimismo. Experimentó un crecimiento del 2,1 por ciento, una décima más que el dato registrado a nivel nacional y nueve décimas superior al índice de la Eurozona, que alcanzó el 1,2 por ciento. La Consejería de Economía, no obstante, aseguró que el entorno internacional de notable incertidumbre y riesgos geopolíticos, derivados de las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China, de los riesgos asociados al Brexit y de la política arancelaria aplicada por Donald Trump, «han comenzado a condicionar ese buen comportamiento andaluz».

En términos trimestrales, la variación del PIB en el cuarto trimestre de 2019 respecto al mismo periodo del año anterior se ajusta para colocarse en el 1,9%. El crecimiento intertrimestral es del 0,4% respecto a los tres meses anteriores. La evolución registrada en 2019 se sitúa ligeramente por debajo de las previsiones planteadas para ese año por dos razones: por un cambio metodológico y por la incidencia de la sequía tras el verano.

Otro dato positivo es que la licitación de obra pública sumó en Andalucía más de 2.491 millones de euros en 2019, un 0,5% más respecto al ejercicio anterior.