Más de 100.000 profesores están llamados a una huelga que la Junta cree «ideológica»

Superan los 100.000, los profesores de centros educativos públicos que están convocados hoy en Andalucía a una huelga en la educación en protesta por el nuevo decreto autonómico de escolarización de la Junta, que los sindicatos convocantes tachan de «ataque a la escuela pública».

En rueda de prensa, representantes de CSIF, ANPE, USTEA, CC OO, UGT, apoyados por la Confederación andaluza de padres y madres Codapa y por el Frente de Estudiantes, explicaron ayer los motivos de la huelga con la que exigen al consejero de Educación, Javier Imbroda, que retire dicho decreto, que se ha empezado a aplicar ya en el arranque del período de escolarización para el curso 2020/21.

Manuela Tagua, de CSIF, aseveró en concreto que la citada norma es un «disparo a la escuela pública» porque se mantiene la ratio de alumno por aula y como consecuencia de la bajada de la natalidad se suprimen unidades, mientras que en la concertada permanecen, por lo que, entienden que se prima a ésta en detrimento de la pública. También rechazan el artículo del decreto por el que se garantiza la libertad de elección de centros públicos y concertados siempre que exista un concertado en la localidad porque los sindicatos alegan que el 93% de los alumnos ya va al centro que eligen y, además, creen que, igualmente, de esa forma se discrimina de forma positiva a la concertada sobre la pública. El sindicato USO tachó la huelga de «miope y partidista» y no la secundará.

Desde el Gobierno andaluz no comparten la argumentación esgrimida para justificar la convocatoria de lo que ven como una «huelga ideológica» en educación y defienden que «no hay que tener miedo a la libertad» de los padres para elegir si sus hijos van a un centro público, concertado o privado. El portavoz del Ejecutivo regional, Elías Bendodo, aseveró que lo que se ha hecho «simple y llanamente» es permitir a los padres que elijan a qué centro llevan a sus hijos. «Se trata de que el Gobierno intervenga lo menos posible en la sociedad», mantuvo, para añadir que los ejecutivos socialistas anteriores habían «sido intervencionistas toda la vida y eso le ha hecho daño a Andalucía», lamentó. Los aludidos, los socialistas, creen que «sobran las razones» para que los andaluces salgan «a la calle» en la huelga en educación ante el «decretazo» de un Gobierno que habla «de libertad» cuando quiere «decir negocio» en la enseñanza. En la misma línea, Adelante realizó un llamamiento a la movilización para protestar contra los «retrocesos» en la educación pública de la región, al afirmar que la nueva normativa es la «gota que colma el vaso» de las políticas «privatizadoras». Algunos centros han transmitido a los padres que se garantizarán los servicios mínimos y una persona del equipo directivo atenderá al alumnado.