Miles de trabajadores andaluces denuncian “desprotección” en sus puestos de trabajo

El estado de alerta decretado por el Gobierno ha obligado a muchas empresas a cerrar sus puertas. Sin embargo, aún hay miles empleados que deben acudir a sus puestos de trabajo. No es ilegal, pero el Ejecutivo insta a las empresas a tomar las precauciones oportunas para que no se produzcan más contagios y garantizar que surjan efectos las medidas adoptadas por todas las administraciones.

En este contexto, sindicatos como CGT y CC OO ya han alertado sobre la situación que se vive en el sector ­–extremadamente feminizado­– del telemarketing en ciudades como Sevilla, Cádiz o Córdoba, en el que miles de teleoperadores trabajan “hacinados” sin las medidas de prevención adecuadas para poder hacer frente al Covid-19.

Una empleada de una de las empresas –con más de cuatro mil trabajadores– que opera en Sevilla denuncia que en sus puestos de trabajo cuentan con “una distancia de menos de un metro entre unos y otros”. Además, asegura que son los propios trabajadores lo que tienen que traer de casa “guantes, alcohol, desinfectantes y mascarillas” para prevenir posibles contagios; “se ha hecho todo fatal”, añade. La teleoperadora lamenta la “situación de inseguridad” que viven individualmente cada uno de ellos. “Estamos totalmente expuestos al contagio y en cada casa tenemos niños, abuelos o personas vulnerables que se exponen a la misma vez”, explica.

Por otro lado, deja claro que la reivindicación no es “dejar de trabajar” sino “trabajar con las medidas de protección” necesarias.

Según CGT, la Policía Nacional ya se ha presentado en la tarde hoy en dos sedes de telemarketing en Sevilla para ordenar el desalojo de los trabajadores. Lo mismo ocurrió ayer sobre las 16:00 horas en Jerez de la Frontera (Cádiz), cuando la policía se presentó en un “call center” para ordenar el cierre de sus instalaciones al comprobar que no se estaban cumpliendo las medidas en materia de salud laboral ni el decreto por el que se ha declarado el estado de alarma por el coronavirus.

En Córdoba, otra empresa del sector también se enfrenta a la denuncia de los sindicatos y trabajadores. SAT y USO se han pronunciado ante “la falta de medidas de protección” frente al Covid-19. En este centro trabajan alrededor de mil personas y ya se ha detectado un caso de infección.

“Actividad de bajo riesgo”

El sector de la piel en Ubrique –que da trabajo a casi cuatro mil personas– también atraviesa un momento coyuntural en el que la Asociación de Empresarios de la Piel de Ubrique (ASOPIEL), bajo el precepto de que “la industria marroquinera está clasificada como una actividad de bajo riesgo”, ha decidido mantener la actividad. No obstante, los empleados han convocado cada noche, a las 21:00 horas, “caceroladas” para reivindicar el cierre de las fábricas o mejores condiciones “higiénico sanitarias” en los talleres en los que, según exponen, “cientos de personas se concentran en escasos metros cuadrados”.

Mientras tanto, Andalucía suma ya 683 afectados, 129 más que ayer, lo que la coloca como cuarta región en número de positivos, tras Madrid, , Cataluña, y País Vasco.