Tribunales

Condenado a tres años y medio por abusar de un hijo al que trasladó que era “un juego secreto normal”

La Audiencia de Sevilla considera probado que el acusado “implicó repetidamente” al menor en “comportamientos sexuales cuyo significado” el niño “desconocía”

Vista del edificio de la Audiencia Provincial de Sevilla
Vista del edificio de la Audiencia Provincial de SevillaManuel Olmedo

La Audiencia de Sevilla ha condenado a tres años y medio de cárcel a un vecino de Lora del Río que abusó de su hijo y le presentó sus “comportamientos sexuales” como “un juego secreto normal entre padre e hijo”, aunque también lo amenazó con “tirar sus juguetes” si se lo contaba a alguien. En la sentencia, la Sección Cuarta condena a J. L R. M. por un delito continuado de abusos sexuales a un menor de trece años, le impone cinco años de libertad vigilada, el pago de una indemnización de 10.000 euros a la víctima y le prohíbe acercarse a menos de 500 metros o comunicar con él durante ocho años, según ha recogido Efe. Además, lo priva de la patria potestad porque “no le procuró el mejor desarrollo, puso en riesgo su evolución en al ámbito sexual, no respetó su integridad psicológica ni, en definitiva, actuó guiado por el interés y beneficio de su hijo”.

El fallo considera probado que el acusado “implicó repetidamente” a su hijo en “comportamientos sexuales cuyo significado, lógicamente, desconocía” el niño. Los hechos ocurrieron entre 2009, cuando el menor tenía tres o cuatro años, y 2012, primero en el domicilio familiar y, tras la separación del matrimonio en 2011, en su nueva casa. “En innumerables ocasiones tocó los órganos sexuales de su hijo”, detalla la sentencia, que refiere que la víctima entendía “estas maniobras como cosquillas”.

El encausado explicó a su hijo que era “un juego secreto (...) del que no debía contar nada a terceros” y “le prometía algún pequeño regalo como recompensa por su participación”, pero también le avisaba de que “tiraría sus juguetes si decía algo”. Más tarde, el menor presentó “conductas sexualizadas” con su hermana pequeña y la madre lo llevó a un psiquiatra y posteriormente a una psicóloga a quien la víctima acabó revelando “lo que su padre realizaba con él”.

La Fiscalía solicitó seis años de cárcel para J. L .R. M., mientras que su ex mujer pidió quince en total por abuso sexual y lesiones, delito este último del que es absuelto al considerar el tribunal que el trastorno por estrés postraumático que sufrió el menor “no obedeció a un acto deliberado” del padre sino que “fue consecuencia del abuso”, por lo que este delito integra al otro. La Sala califica el relato del menor de “coherente, completo y del todo verosímil” y destaca que no traslució “el mínimo rencor o resentimiento” contra su padre, “más allá de no entender por qué le había hecho eso”.

La sentencia, facilitada por la oficina de comunicación del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), critica las “especulaciones” de la defensa sobre el supuesto afán de “venganza” de la madre contra el acusado porque este la iba a demandar tras enterarse de que su otra hija en realidad era de otro hombre. En ese sentido, a la Sala le “impresionó” la “sincera y honesta” declaración de la madre y resalta que al principio no vinculó al padre con la conducta del niño, por lo que “obviamente no podía tratarse de ningún montaje” para “incriminarlo”. El procesado consignó 3.000 euros antes del juicio porque era la petición de la Fiscalía, pero esa cantidad “ni de lejos” supone “verdadera e íntegra reparación del daño”, dice el tribunal, que le aplica una atenuante “ordinaria” y “de escasa significación”.