Cambio en la gestión de las políticas de emprendimiento

La creación de la Agencia Trade fue uno de los grandes proyectos de la anterior legislatura. Su impulso respondía a un doble objetivo. Por un lado, lanzaba un mensaje sobre reestructuración del sector público andaluz en un momento en el que se estaban realizando auditorías para hacerlo más eficaz y eficiente; y, por otro lado, se pretendía unificar todas las políticas de fomento e impulso empresarial en una «ventanilla única». En esta legislatura, este proyecto podría ser retocado para ajustarse a la nueva distribución de competencias aprobada por el presidente Juanma Moreno.

A día de hoy, es muy probable que la Fundación Andalucía Emprende no se integre en la Agencia Trade, que perdería así a uno de los cuatro entes que originariamente la componían. Los otros tres, Agencia IDEA, Extenda y Agencia Andaluza del Conocimiento, sí formarían parte de la Agencia Empresarial para la Transformación y el Desarrollo Económico (Trade).

El argumento principal para este cambio en la hoja de ruta es que la nueva Consejería de Universidad, Innovación e Investigación desarrolla competencias en materia de emprendimiento. De hecho, en su decreto de estructura se recoge entre sus atribuciones «el apoyo a la innovación tecnológica y la inversión empresarial en materia tecnológica, así como el desarrollo de la cultura emprendedora y del emprendimiento tecnológico en la Comunidad Autónoma, sin perjuicio de las competencias que correspondan en esta materia a otras consejerías».

Además, en su estructura organizativa existe una Dirección General de Fomento del Emprendimiento y la Formación Continua y que tiene atribuidas funciones similares a las que desarrolla la Fundación Andalucía Emprende. Por ejemplo, «la coordinación y gestión de los programas destinados a promover la creación de iniciativas emprendedoras y generadoras de nuevos proyectos empresariales basados en el conocimiento» o «el fomento y gestión de programas destinados a la aceleración y acompañamiento de nuevos proyectos empresariales basados en el conocimiento».

Por su parte, entre los objetivos fundacionales de Andalucía Emprende se encuentra «promover la iniciativa emprendedora y el desarrollo empresarial», así como «apoyar la creación y la consolidación de empresas y empleo».

Abundando en esta teoría, la ley andaluza de Fomento del Emprendimiento ya atribuía funciones específicas a Andalucía Emprende, especialmente a través de la vinculación que mantenía con «las corporaciones locales, los agentes económicos y sociales más representativos de la comunidad, las universidades y entidades e instituciones de la sociedad civil andaluza, como las cámaras de comercio, industria y navegación, o las asociaciones y organizaciones profesionales del trabajo autónomo, en el ejercicio de actividades y prestación de servicios en el ámbito del emprendimiento».

La ley de creación de TRADE justificaba la decisión de integrar estos cuatro entes, entre otras cuestiones, en que para la Empresa Pública Andaluza de Promoción Exterior, S.A. «se considera relevante la coordinación de actividades y esfuerzos con las que realiza Andalucía Emprende, Fundación Pública Andaluza, existiendo también duplicidades de funciones entre esta fundación y Extenda con la propia Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía (IDEA)».

Igualmente, también apuntaba que «en la Agencia Andaluza del Conocimiento se aprecian importantes duplicidades con Agentes del Sistema Andaluz del Conocimiento, con la propia consejería de adscripción, con Extenda, con la Agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía (IDEA) y con Andalucía Emprende, Fundación Pública Andaluza».

A cierre de 2019, fecha de la auditoría que se le hizo a todo el sector público andaluz, la Fundación Andalucía Emprende contaba con 906 trabajadores y 262 centros repartidos por las ocho provincias andaluzas.