Agreden a un educador de un centro de menores de Los Alcores (Sevilla)

Un educador de un centro de menores de Los Alcores (Sevilla) ha sido agredido por un usuario en régimen terapéutico, según ha denunciado este miércoles CCOO, que ha alertado del deterioro de las condiciones laborales en este tipo de espacios.

El sindicato ha mostrado su "profunda preocupación" por un incidente que, a su juicio, evidencia la "crítica situación" que atraviesan los profesionales de este centro, en un momento "especialmente delicado" para el sector tras lo sucedido en Badajoz, donde una educadora falleció tras ser agredida presuntamente por un menor.

CCOO ha exigido en un comunicado un aumento de la inversión pública que garantice los recursos humanos y materiales necesarios para proteger a las personas trabajadoras.

"No se puede seguir exponiendo a las personas trabajadoras a situaciones de riesgo sin proporcionarles las herramientas y condiciones laborales adecuadas", ha indicado el sindicato, que ha detallado que, en el caso del centro de menores de Los Alcores, la plantilla del centro está compuesta por cerca de 200 profesionales de alta cualificación.

Estos se enfrentan diariamente a "desafíos complejos" al atender a 67 jóvenes internos, de los que más de la mitad presenta problemas graves de salud mental o adicciones que requieren de atención personalizada.

CCOO ha denunciado la falta de recursos y la escasez de especialistas en psicología clínica y psiquiatría dificultan enormemente la labor educativa y terapéutica.

El sindicato ha alertado de que las actuales condiciones de trabajo están generando un grave deterioro en la salud mental de los profesionales.

La exposición continuada a situaciones de tensión, unida a la falta de medios y apoyo institucional, está provocando cuadros de ansiedad, estrés laboral crónico y otras patologías relacionadas entre el personal.

CCOO ha lamentado la insuficiente financiación pública, que prioriza licitaciones basadas en criterios económicos por encima de la calidad del servicio, la falta de supervisión por parte de la Junta de Andalucía, que no garantiza condiciones laborales dignas y seguras, y el estigma social que rodea a los jóvenes infractores, lo que reduce el interés político y ciudadano por mejorar sus condiciones de internamiento.

"Las agresiones al personal se han convertido en un problema recurrente. Cada mes se registran casos de amenazas, insultos y agresiones físicas, siendo los educadores sociales y los auxiliares de cuidado educativo quienes más sufren la situación debido a su contacto directo y continuo con los jóvenes", ha expuesto.

La última agresión, ocurrida este lunes, evidencia a juicio del sindicato la urgencia de adoptar medidas concretas para proteger al personal.

CCOO ha propuesto un refuerzo inmediato de las plantillas, la actualización de los protocolos de seguridad, la formación especializada para el personal y reforzar los servicios de psicología clínica y psiquiatría de estos centros.