Sociedad

El primer municipio costero peninsular y continental con aseos ostomizados está en la provincia de Almería

Hasta ahora, sólo una playa española en Tenerife contaba con un baño adaptado

Baños ostomizados en la Universidad Pablo de Olavide, similares a los de Roquetas
Baños ostomizados en la Universidad Pablo de Olavide, similares a los de RoquetasUPO

Roquetas de Mar (Almería) se ha convertido en el primer municipio costero peninsular y continental que cuenta con aseos adaptados a personas ostomizadas, según ha informado este martes la Federación de Asociaciones de Personas Ostomizadas de España (FAPOE).

La FAPOE ha precisado en un comunicado que hasta ahora, sólo una playa española, que está en Tenerife, contaba con un aseo adaptado a personas ostomizadas, aquellas que "viven con una bolsa pegada al abdomen para recolectar las excretas corporales".

"La ostomía no es una enfermedad, es la consecuencia de padecerla o haberla padecido, como distintos tipos de cánceres o enfermedad inflamatoria intestinal, entre otras", ha abundado.

Más de 210.000 personas del país, además de los turistas extranjeros ostomizados, podrán acudir a las playas roqueteras gracias a estos aseos, ya que sin adaptaciones para este colectivo "no pueden normalizar sus vidas".

La instalación de dichos aseos ha sido posible gracias al trabajo realizado por la Asociación de Enfermos de Crohn y Colitis Ulcerosa de Almería (ACCU Almería) con el asesoramiento de FAPOE. Las playas en las que se han instalado los aseos adaptados son Aguadulce y La Urbanización de Roquetas de Mar.

"Son los únicos aseos de estas características instalados no solo en la costa peninsular, sino de toda la Europa continental. Ambos aseos para ostomizados están estratégicamente instalados en las zonas de mayor afluencia de personas en el municipio turístico", explica el comunicado.

Aunque los aseos aún no están abiertos, el presidente de ACCU Almería, Francisco Javier González, confía en que puedan abrirse "cuanto antes". Además, ha pedido a las administraciones que "permanezcan abiertos todo el año, permitiendo así salir a pasear junto al mar a las personas ostomizadas".

"Las características de los aseos adaptados hacen que las personas ostomizadas puedan vaciar y enjuagar o cambiar las bolsas de ostomía con dignidad e higiene. En un aseo convencional el váter nos queda a la altura de las rodillas; para no salpicarse, los ostomizados se ven obligados a arrodillarse o a agacharse, algo que no todos pueden hacer, y aunque pudieran, no es lo ideal hacerlo en aseos públicos, ni por higiene, ni por salud postural, ni por dignidad", ha añadido.