«En este país se defiende más al criminal que a la víctima»

No cabe más dolor tras un crimen. «Hace muchísimo tiempo que dejé de creer en la Justicia, hay jueces buenos, hay jueces malos y por desgracia en el caso de mi hija ha tocado todo lo peor. Salas malas, jueces ineptos o jueces que se dejan llevar no sé por qué, porque todo lo que ha habido en el caso de mi hija han sido incongruencias una detrás de otra y palos a la familia», señaló Eva Casanueva, madre de Marta del Castillo, a escasos metros del último lugar donde fue vista por última vez la joven con vida el 24 de enero de 2009. La familia de la joven espera que el Tribunal Supremo les dé amparo tras la absolución de la condena por falso testimonio de «El Cuco» y su madre. «No hay vergüenza en este país. Se defiende más al criminal que a la víctima», señalaron.

Los padres de Marta del Castillo consideran que la sentencia de la Audiencia de Sevilla que ampara las mentiras de «El Cuco» y su madre «está llena de paja, mentiras y falacias». La Justicia, redundaron siempre actúa «a beneficio del sinvergüenza, se ampara más al sinvergüenza que a la víctima, eso es lo que le llega a la sociedad, a los que somos analfabetos en legislación, los que no hemos estudiado Derecho y los que nos tenemos ni idea de la Justicia. Lo que llega al ciudadano de a pie, al inculto que no sabe nada de esto, es que hay una señora, una sinvergüenza, que se ha reído de la Justicia desde el primer momento», manifestó Eva Casanueva.

La madre de Marta señaló que «hace ya muchísimo tiempo» que dejó de creer en la justicia, porque «todo lo que ha habido en el caso de mi hija han sido incongruencias, una detrás de otra, y palos a la familia». La intención de la familia sigue siendo «defender el hecho de que ha habido una niña de 17 años asesinada, ha habido muchos implicados y hasta la fecha de hoy yo no sé dónde está mi hija, ni siquiera sé cómo la mataron», lamentó.

«Es una vergüenza para este país que haya un sistema y que haya unos legisladores que después de 15 años no hayan enmendado la plana», dijo, solicitando que «se pongan las pilas».

La familia subrayó que con el fallo de la Audiencia «el mensaje que estamos dando a la sociedad es que puedes mentir en un juicio, que no pasa nada y puedes hacer lo que te dé la gana, ese es el mensaje que se está transmitiendo». Tanto el Cuco como su madre, insistió, «se han reído de el sistema legal completamente».

El padre de Marta, Antonio del Castillo, expuso que «los jueces no se han atenido al Código Penal» y recalcó que han estado «dos años para buscar tanta mierda y tanta paja. Cuarenta y dos folios. Dos años para buscar lo que pone al final, sentencia absolutoria».

«Las mentiras de la madre afectaron a la investigación, la entorpecieron», recordó Eva Casanueva, en contra de lo que dice la sentencia. «Si miente para la investigación es relevante, porque en ese momento se estaba llevando una investigación policial, y si una persona tiene coartada, entonces ya la policía deja de investigar ese hilo. Por lo tanto sí es relevante», insistió.

El siguiente paso es el recurso: «Vamos siguiendo los pasos que nos marca la ley. Nos queda otra cosa. O seguimos la ley o soltamos dinero y pagamos a alguien. Eso es lo que hay en esta sociedad. Pero siguiendo la ley se ve que aquí nunca llegamos a nada», dijo Antonio del Castillo, para quien los enemigos «ya no son Miguel, el hermano, el Cuco o su madre, sino los señores de negro que se sientan ahí, en el Prado, estamos viendo que no se ciñen al Código Penal».

La familia, pese a los continuos varapalos, no esperaba este final. «Podrían condenarlo a más o menos tiempo, podrían incluso con menos tiempo no entrar en la cárcel, de acuerdo, pero absolutoria en la vida, porque por lógica, simplemente por lógica, habiendo admitido los hechos», dijo Del Castillo.

Sobre el posible paradero del cuerpo de Marta, Eva Casanueva también es pesimista: «La policía ya no va a mover un dedo. La justicia nos ha estado dando la espalda porque ya somos un caso cansado para ellos, quisieran meternos en el cajón de los justos». «Se va a encontrar pero va a ser de pura casualidad», lamenta la familia de la víctima.

Hasta el Constitucional, como los ERE

La primera idea de Antonio del Castillo tras la absolución de «El Cuco» y su madre fue ir «al Palacio de Justicia a poner una denuncia sobre el artículo 404 del Código Penal», por prevaricación pero «lo paró su mujer y su abogada». Del Castillo apelará al Supremo y aludió al Constitucional con las recientes revisiones de los ERE.