Detenido un hombre de 50 años que vivía con su madre muerta en un piso de Oviedo y cuyo olor alertó a los vecinos

El mal olor que había en las escaleras del edificio fue el detonante. Los vecinos del edificio, ubicado en Oviedo, llamaron a la Policía Nacional alertando de la situación y una vez en el lugar de los hechos, se encontraron con que dentro estaba el cadáver de Florentina, de 73 años, que estaba muerta, mientras que su hijo continuaba haciendo vida aparentemente normal en la misma casa.

El hombre, de 50 años, ha sido detenido y se le acusa de un presunto delito de homicidio, aunque faltan las pruebas de la autopsia que se han realizado a Florentina en el Instituto de Medicina Legal.

Un olor insportable

Los hechos tuvieron lugar en el barrio de La Corredoria, en el número 2 de la calle Lucas Rodríguez Pire. Los vecinos llevaban días intuyendo que algo no iba bien en aquella casa, echaban en falta a "Tina", que era como se conocía a Florentina en el barrio, una mujer de buen carácter y buena vecina. Y el olor era prácticamente insoportable.

Fue el viernes cuando se destapó el drama. Varios agentes acudieron al domicilio que compartían madre e hijo, pero José nos les dejó entrar. Con una orden de registro pudieron acceder al interior este lunes, sobre las siete de la tarde, y ahí se encontraron con la peor de las imágenes esperadas. Tina estaba muerta.

Los vecinos aseguran que José siempre ha sido un hombre solitario y de carácter extraño. "No hablaba casi con nadie, pero ella era encantadora", dice una de las vecinas que prefieren mantener su identidad en el anonimato.

Treinta años viviendo juntos

Madre e hijo compartían piso desde hace tres décadas y hasta hace unos años solían salir juntos a pasear o a hacer recados, pero hacía años que Tina no salía prácticamente de casa, aunque sabían que estaba allí porque la escuchaban hablar. Pero la voz de Tina dejó de escucharse hace tiempo y el mal olor se instaló en la escalera y en el portal.

Cuando los agentes accedieron a la casa se encontraron con una vivienda en condiciones insalubres, con tres gatos y nueve perros, bolsas de basura y acumulaciones de todo tipo de cosas. Los animales también están mal, desnutridos.

Falta saber el resultado de la autopsia, pero lo que sí se sabe es que el cuerpo de Tina no fue descuartizado, algo que se comenzó a comentar en el barrio casi de inmediato. Otros vecinos creen que la mujer pudo hacer muerto de forma natural y que quizás su hijo no se hizo cargo de poner el caso en conocimiento de las autoridades. "Era un hombre muy solitario y de carácter extraño. A saber...", explica un vecino de La Corredoria que los conocía desde hace tiempo.

La ciudad de Oviedo está consternada con el suceso y la investigación para esclarecer los hechos sigue abierta.