Un profesor de judo asturiano acusado de agresiones sexuales continuadas a tres alumnas reconoce los hechos y acepta 6 años y medio de prisión

Un profesor de judo de Oviedo acusado de agresiones sexuales continuadas a tres alumnas reconoció hoy los hechos y asumió condenas que suman 6 años y medio de prisión y, entre otras penas y medidas, la inhabilitación para trabajar de manera regular y directa con menores de edad.

Durante los primeros meses de 2023 el acusado, de 39 años, era monitor de judo en Oviedo. Entre sus alumnos estaban tres menores, nacidas en 2008.

Aprovechando su condición de entrenador, el acusado consiguió crear con ellas un vínculo cercano y distinto al que tenía con los demás alumnos. La confianza se tradujo, además, en un trato personal en las redes sociales, pues las añadió a un grupo de WhatsApp a través del que organizaba actividades lúdicas fuera de lo estrictamente deportivo, como rutas en bicicleta o salidas a la playa.

Una vez que había ganado su confianza, el acusado comenzó a desviar habitualmente las conversaciones que mantenía con las tres menores a temas sexuales totalmente inapropiados y alejados de cualquier fin educativo o didáctico. En ese ambiente de relajación, confianza y camaradería, valiéndose de su condición de monitor y de la diferencia de edad, además de dirigirles expresiones de clara significación sexual, les prodigaba abundantes gestos de afecto, como besos y abrazos, fuera de los límites socialmente admisibles.

El acusado siempre utilizaba la furgoneta de su propiedad para realizar las excursiones o actividades de ocio con las menores que él mismo programaba. Durante los primeros días de enero de 2023, el acusado llevó en ella a Gijón a las tres alumnas.

Tocamientos y juguetes sexuales

Durante el trayecto, con ánimo libidinoso, realizó tocamientos a una de ellas. A su regreso a Oviedo, el acusado llevó a dos de las menores a su domicilio y, una vez allí, les enseñó objetos sexuales y tuvo con ellas conductas inapropiadas. Esta situación se repitió días más tarde con una de las niñas, a la que llevó a su casa con pretextos relacionados con el judo. E igualmente con la misma menor, unos días más tarde, después de que el acusado diera clases en un colegio de Oviedo, volvió a comportarse de la misma manera. El acusado aprovechaba los entrenamientos de las tres menores para satisfacer sus instintos sexuales.

El creciente malestar de las niñas por el comportamiento del acusado les llevó a dejar los entrenamientos durante las primeras semanas de marzo de 2023.

Fueron dos madres y un padres los que denunciaron los hechos, que fueron considerados constitutivos de tres delitos continuados de agresión sexual sobre menor de 16 años.

Tras reconocer los hechos, el acusado aceptó la pena 6 años y medio de prisión y la inhabilitación para trabajar con niños durante 15 años