Turismo en el Norte

¿Y qué hago si llueve en Asturias?

Pese a que la mayoría de los turistas saben que en Asturias predomina la lluvia hay oferta más que suficiente para quienes prefieren evitar el mal tiempo

Los participantes en la feria quieren darle un impulso a la pasión por los acuarios, tanto como área de negocio o como hobby en crecimiento
Una niña en una visita al acuario.larazon

Que el Paraíso Natural necesita agua para mantenerse verde no es ninguna novedad, sin embargo son muchos los turistas que buscan planes bajo techo cuando visitan un fin de semana o unos días Asturias y el mal tiempo no da tregua. El Principado tiene oferta más que suficiente para quienes no quieran abrir el paraguas. Desde la punta más occidental a la oriental y pasando por el centro de la región, estos son cinco visitas para conocer Asturias aprovechando que el tiempo no invita a estar fuera.

El museo etnográfico de Grandas de Salime. Hay museos y luego está este, que poco o nada tiene que ver con la imagen que tenemos en la cabeza de un museo clásico o al uso. Bautizado con el nombre de quién fue su fundador y creador, Pepe "El Ferreiro", visitar este museo es viajar al pasado de Asturias y a la vida rural de quienes habitaban los pueblos del occidente asturiano interior en el siglo pasado. Fue precisamente Pepe "El Ferreiro" el que, visitando casas y casas, recuperó miles y miles de piezas que en muchas ocasiones se guardaban en los desvanes de la gente de los pueblos y a los que no se les daba el valor que realmente tenían. Una colección etnográfica inmensa, merecedora de una visita y que se ubica en la antigua casa rectoral de Grandas de Salime. Este museo, que se inauguró en 1984, fue ganando espacio con el tiempo y a día de hoy cuenta además con dos construcciones más: A Casoa y a Casa del Molinero. Además, en el complejo museístico también se encuentran un molino, un hórreo, una capilla, una panera y un cabazo. Dentro del complejo se han recreado también, con cientos de piezas antiguas, un bar y una barbería.

Museo marítimo de Luanco. Ubicado en la capital del concejo de Gozón, este complejo está dedicado a la exposición del patrimonio marítimo y está especialmente recomendado para visitar con niños. Se divide en tres partes; una primera, donde hay una muestra marina de flora y fauna que recorre todos los tiempos, desde la Prehistoria hasta el día de hoy. En una segunda fase se visita la carpintería de ribera para pasar después a la parte central de este museo, que consta de un barco que se puede visitar y donde se exponen artes de pesca tradicionales y las piezas propias que se usaban en la mar. Se fundó en el año 1948 y actualmente tiene abierta una exposición de piratas y corsarios. La figura central es un bergantín pirata de catorce metros de eslora al que se puede acceder.

Minero por un día, visita al Pozo Sotón. Aunque las minas en Asturias se han ido cerrando y la actividad de extracción minera es ya cosa del pasado, mantener el patrimonio industrial vinculado a la mina es prioritario y es por ello que iniciativas como las del Pozo Sotón tienen tanto éxito. Este pozo, ubicado en el concejo de San Martín del Rey Aurelio, permite hacer un viaje inmersivo a la minería y descender por el pozo hasta 386 metros. La reconversión industrial, que comenzó en los años ochenta, fue pasando el cierre de los pozos, uno a uno, y éste, concretamente, cesó su actividad en el año 2014. Propiedad del grupo Hunosa, ha sido declarado bien de interés cultural y puede visitarse desde el año 2015. La bajada se hace en una jaula hasta la octava planta del pozo, ahí se recorren las entrañas de la mina y se conoce la labor de los mineros. La visita no deja indiferente a nadie.

Museo Jurásico de Asturias. Ubicado en Colunga, a 155 metros sobre el nivel del mar, y con la forma de una enorme huella tridáctila de dinosaurio. Uno de los mayores encantos de este museo es la colección de dinosaurios a tamaño real que se han recreado en toda la zona exterior, así como los huevos de estos animales, y que suponen todo un reclamo tanto para los amantes del Jurásico como para los más pequeños de la casa. Está situado en la rasa de San Telmo (Colunga), con vistas al puerto de Llastres y a la playa de La Griega, que atesora un interesante yacimiento de huellas de saurópodos.

En total, el Museo Jurásico de Asturias consta de 2.500 metros cuadrados de espacio expositivo, en los que se pueden ver reproducciones, esqueletos y fósiles. Su visita descubre la forma de vida de estos animales que poblaron la costa asturiana hace millones de años.

El acuario, en Gijón. Ir al acuario de Gijón un día que hace malo se ha convertido casi en un clásico para los asturianos así que lo mismo podrían hacer los turistas. Ubicado en la zona de la playa de Poniente y con un amplio aparcamiento, el acuario cuenta con más de sesenta acuarios de agua dulce y salada y diez terrarios. En total, dos millones de litros de agua que recrean la flora y la fauna de algunos de los ecosistemas más importantes del planeta: el bosque húmedo tropical americano, los océanos Índico y Pacífico, el océano Atlántico, los grandes ríos y lagos africanos y la Macaronesia.

Aunque llueva, Asturias siempre tiene opciones para disfrutarla.