«Sólo en un uno por ciento de los pacientes con dolencias de la espalda la cirugía está recomendada»

En muy pocas ocasiones el dolor de espalda tiene que tratarse en quirófano. Sin embargo, ésta es una de las preguntas que más frecuentemente escuchan los especialistas de columna por parte de sus pacientes, especialmente si éstos han consultado en las redes sociales, o incluso si han visitado previamente a otros profesionales. La realidad es que las posibilidades y opciones de tratamiento de estas dolencias son muy diferentes y hay que individualizar en cada caso.

Para entender esta discrepancia de tratamientos hay que tener en cuenta que las dolencias de columna son una de las causas más habituales de visita a los médicos de Atención Primaria; son la causa más frecuente de baja laboral y, de hecho, son una de las principales partidas de salud en el gasto público sanitario.

El mayor problema reside en que, en la mayoría de los casos, no existe una correlación entre los hallazgos de imagen (como RX o Resonancias) y los síntomas clínicos del paciente. Por una parte, un 80% de las dolencias de espalda no presenta una imagen de lesión de la columna. Estas afecciones suelen estar producidas por una alteración muscular o ligamentosa debida a una sobrecarga o por pequeños cambios inflamatorios consecuencia de malos hábitos. Pero ninguna de estas lesiones se visualizan en las diferentes pruebas de imagen. Por otro lado, si se realizasen pruebas de imagen entre la población sana, hasta un 80% presentarían diferentes alteraciones y cambios degenerativos en la columna, que no les están produciendo ninguna clínica. Es por ello que, aunque las pruebas de imagen son una herramienta muy útil para el médico, el diagnóstico definitivo debe basarse en la exploración física y en una minuciosa entrevista con el profesional médico sobre las características y duración de su dolor, así como de sus otros síntomas, un conjunto de pruebas y la experiencia clínica del especialista. E, incluso así, no siempre existe un consenso.

En el trabajo «Mulidisciplinary Indication Variability in Degenerative Lumbar Spine Surgery», publicado este año en la prestigiosa revista «Spine», se analiza el resultado de un estudio que revela la variabilidad en la atención de una misma patología, dependiendo fundamentalmente de los conocimientos de los especialistas. En el estudio se reclutó a más de 200 cirujanos de columna, traumatólogos y neurocirujanos de diferentes edades y grados de experiencia, procedentes de cuatro países (Francia, España, Alemania y Estados Unidos). A todos se les presentaban seis casos con los problemas más frecuentes de columna lumbar, con diferentes opciones de tratamiento (desde el abordaje conservador a diferentes técnicas de tratamiento quirúrgico). El resultado demostró una gran variabilidad que dependía, fundamentalmente, del país donde se ejercía, más que de la especialidad médica o de los años de experiencia. Se evidencia que, aunque estamos en un mundo global, cada uno se forma en una «escuela» y aplica sus buenos resultados como parte de su experiencia clínica. Asimismo, existen ciertas variaciones dentro de cada país, dependiendo del grado de especialización y la edad.

Al realizar las revisiones sobre la atención de diferentes problemas de columna, como puede ser la presencia de una hernia de disco, nos encontramos con que, a pesar de la gran cantidad de literatura científica existente y los múltiples trabajos realizados, no existe una clara y única pauta de tratamiento.

Así pues, «Doctor, ¿debo operarme de la columna?» es una pregunta difícil de contestar. Cada proceso debe ser tratado de forma totalmente individualizada, atendiendo no sólo a las pruebas de imagen, sino a las expectativas y necesidades de cada paciente. En la columna los procesos son lentos y, en la mayoría de los casos, pueden ser tratados de forma conservadora. Sólo en un uno por ciento del conjunto de pacientes con dolencias de la espalda la cirugía está recomendada. Lo mejor es ponerse en manos de un especialista con experiencia, que nos transmita confianza y que escuche nuestros síntomas y sea capaz de llegar a un diagnóstico certero con ellos.

Pero no debemos olvidar que la prevención es la mejor arma frente a los dolores de espalda. Por este motivo, debemos seguir las recomendaciones de los especialistas:

-La higiene postural, es decir, el adoptar una actitud de correcta alineación de la espalda, resulta fundamental mientras se está sentado, al caminar o simplemente al estar parados.

-En la medida de lo posible, se debe evitar el estrés, puesto que es una causa común de los dolores de espalda y puede impedir que se realicen las actividades diarias, generando una importante limitación. Las diferentes técnicas de relajación, como yoga o meditación, pueden suponer una ayuda en este sentido.

-Resulta importante elegir un colchón adecuado. El estudio realizado por el Grupo de Estudio «Spanish Back Pain Research Network» demostró que los colchones de una firmeza media-alta mejoran el dolor y la discapacidad funcional en los pacientes con dolor lumbar crónico inespecífico.

-Realizar algún deporte o ejercicio moderado para fortalecer y tonificar los músculos y llevar un estilo de vida saludable.

-Poner en práctica estas recomendaciones puede prevenir ese 99% de dolores de espalda que no requieren cirugía.

Debono B, Lonjon G, Alvarez-Galovich L, Kerever S, Guiot B, Eicker SO, Hamel O, Ringel F. Indication Variability in Degenerative Lumbar Spine Surgery: Four-nation Survey. Spine (Phila Pa 1976). 2018 Feb 1;43(3):185-192.