Cáncer

«El intervencionismo radioguiado permitirá resolver tumores sin recurrir a la cirugía»

Dr. Manuel Albi / Jefe del servicio de Ginecología y Obstetricia del Hospital La Luz de Madrid

Dr. Manuel Albi
Dr. Manuel Albilarazon

1- Se diagnostican 27.000 nuevos casos de cáncer de mama al año en España y la supervivencia a cinco años ha subido hasta el 90%. ¿Existe margen de mejora?

Se ha avanzado mucho, pero es mucho también lo que aún podemos mejorar: desde la evolución tecnológica de los métodos de detección hasta los programas futuros de cirugía cada vez menos invasiva, pasando por la mejora en los tratamientos sistémicos y el progreso de la genómica. Por otro lado, aunque ya existe una importante concienciación social, es preciso seguir trabajando en la generalización de los programas de cribado y en la información para que todas las mujeres acudan a hacerse revisiones periódicas en función de su edad y sus antecedentes.

2- ¿Qué porcentaje de tumores se consigue detectar en fases iniciales?

Quizá sería más correcto hablar de enfermedad precoz y avanzada. Actualmente la mayoría de tumores se diagnostican en estadio precoz. En el momento del diagnóstico el cáncer se encuentra sólo en la mama entre el 61% de las mujeres, mientras que tan sólo un 5% de las ellas tienen cáncer metastásico cuando se les diagnostica por primera vez.

3- ¿En qué aspectos habría que incidir, aún más, para su prevención?

Es necesario seguir insistiendo tanto en la necesidad de disponer de programas de cribado de ámbito poblacional, como en mejorar los porcentajes de cobertura de dichos programas. Un estadio precoz en el momento del diagnóstico es el mejor tratamiento y el cribado con mamografía disminuye la posibilidad de morir un 40% en mujeres entre 50 y 69 años; y también en el grupo entre 40 y 49 años, aunque en una magnitud menor. Recordar también el papel de la autoexploración mamaria. Aunque pudiera considerarse por algunos como un método controvertido, al no haber demostrardo reducir la mortalidad con su uso e incluso dar lugar a biopsias innecesarias, desde nuestro grupo consideramos que puede ser útil si se combina con mamografías y exploraciones físicas regulares. No podemos olvidar que el 20% de los casos se detectan durante 4- una exploración física y no con una mamografía.

Se habla mucho de la importancia del abordaje multidisciplinar pero, ¿realmente se trata de esta forma?

La concienciación de la necesidad de un tratamiento multidisciplinar está muy extendida entre los profesionales sanitarios que atendemos esta patología. Hoy en día no podemos abordar un tratamiento sin tener en cuenta todas las opciones posibles para cada caso en particular, desde el radiólogo que estudia las mamografías u otras pruebas de imagen y realiza las biopsias; el patólogo que analiza estas biopsias; el ginecólogo que opera a las pacientes junto con el cirujano plástico si fuese necesario; el oncólogo para los muchos tratamientos que acompañan a la cirugía; el radioterapeuta para administrar la radioterapia; el psico-oncólogo para el apoyo psicológico en esos momentos difíciles. Todos son piezas fundamentales. Todos deben formar parte de un comité multidisciplinar que celebra reuniones periódicas para estudiar los nuevos casos con el objetivo de ofrecer una medicina personalizada.

5- ¿Qué es la medicina personalizada?

Pretende ofrecer un tratamiento específico para cada paciente y para su tumor. Disponemos de dianas terapéuticas, es decir, de tratamientos exclusivos para un tumor en concreto, que van a atacar las células malignas sin provocar daño en las sanas.

6- ¿Qué porcentaje de casos pueden abordarse de esta manera?

Hoy en día todos los casos deben pasar por un comité multidisciplinar y recibir un esquema de tratamiento personalizado para cada paciente. Quizás uno de los mayores ejemplos es el avance frente al cáncer de mama HER2+. Un subtipo de cáncer que afecta en torno a un 25% de las diagnosticadas. Hace 15-20 años era el tipo de tumor más agresivo y el que tenía peor pronóstico y mayor capacidad de metástasis. Sin embargo, actualmente se dispone de algunos tratamientos biológicos diseñados específicamente para el HER2+. Esto ha cambiado su historia natural, consiguiendo muy buenos resultados en un grupo de pacientes que hasta hace poco presentaban un mal pronóstico.

7- ¿Qué novedades destacaría en cuanto al abordaje terapéutico?

Por un lado, las técnicas genómicas que han confirmado que existe una asociación entre la evolución natural del cáncer de mama en cada mujer y el perfil de expresión genética del tumor. A raíz de ello se ha establecido una nueva clasificación en subtipos moleculares para fijar el pronóstico y planificar el tratamiento. Además, las distintas plataformas genómicas que analizan la posibilidad de que el tumor vuelva a aparecer y nos ayudan a la hora de decidir sobre la conveniencia o no de recibir quimioterapia adyuvante. Por otro lado, la descripción de regímenes de quimioterapia más efectivos y el desarrollo de fármacos biológicos, como trastuzumab o pertuzumab, que mejoran significativamente el intervalo libre de enfermedad y la supervivencia en los HER-2+.

8- Y, ¿qué está por venir?

La evolución tecnológica de los métodos de diagnóstico por imagen y de intervencionismo radioguiado permitirán resolver algunos cánceres sin recurrir a la cirugía, el desarrollo de la genómica permitirá conocer la evolución de cada subtipo tumoral y establecer así terapias acordes a esa evolución o estrategias preventivas, los fármacos que utilizamos serán más concretos, más selectivos y destruirán o impedirán la división de las células malignas sin afectar al resto.

9- ¿Qué se puede hacer para mejorar la calidad de vida de las pacientes?

Sabemos que unos hábitos de vida saludables son beneficiosos, tanto para la prevención del cáncer en general, como para mejorar la tolerancia a los tratamientos oncológicos y reducir las recurrencias de la enfermedad por lo que la mujer que ya ha pasado por un cáncer de mama también debe hacerlo.

10- ¿Qué peso tiene ese paciente en la toma de decisiones?

La información es un derecho de las pacientes y nuestro deber es trasmitirla. La mujer informada participa de su enfermedad, opina y acuerda con los profesionales sanitarios el manejo de su enfermedad. Éste es en general el perfil de la mujer actual, es el que deseamos los profesionales y estoy seguro de que el que mejores resultados conlleva.