Turismo

Preocupación entre los turistas por esta nueva costumbre en los restaurantes de Mallorca

La prensa británica se ha hecho eco de los cobros por adelantado para evitar el 'no show' que en algunos casos puede alcanzar los 40 euros por persona

Terrazas de restaurantes
Terrazas de restaurantesistock

El sector de la restauración en Baleares, especialmente en Mallorca, ha empezado a implantar cambios en la gestión de reservas y pagos. Ante la escasez persistente de personal y un notable aumento de las inasistencias de clientes, algunos restaurantes están optando por exigir un pago anticipado para garantizar la reserva.

En algunos casos, la cifra puede alcanzar los 40 euros por persona, como ha publicado el tabloide británico Express. El medio de Reino Unido ha transmitido además la preocupación de los turistas ingleses ante la adopción de este nuevo modelo.

Este sistema, cada vez más habitual, responde también a una tendencia generalizada de contención del gasto por parte de los consumidores, que vigilan el desembolso que hacen durante sus vacaciones en un contexto económico marcado por el encarecimiento del coste de vida.

A esta situación se suma la dificultad para encontrar personal cualificado, una problemática que el sector arrastra desde la pandemia y que ha afectado con fuerza al archipiélago en las últimas tres temporadas turísticas.

Falta de trabajadores

En Mallorca, la falta de trabajadores ha llevado incluso a reducir horarios de apertura en numerosos establecimientos durante los años 2022, 2023 y 2024. Entre las causas de esta escasez de mano de obra se encuentran los altos precios del alquiler y la dificultad para acceder a una vivienda asequible, lo que limita la posibilidad de atraer y retener trabajadores en la isla.

Para hacer frente a esta situación, algunos bares y restaurantes han comenzado a implementar sistemas de autopago, como el uso de códigos QR para hacer pedidos y abonar la cuenta.

Ambiente en la playa de la Malvarrosa en Valencia
Ambiente en la playa de la Malvarrosa en ValenciaAlberto R RoldánLa Razón

Un modelo similar al italiano

Juanmi Ferrer, presidente de la Asociación de Restaurantes de CAEB, considera que esta medida es una de las pocas salidas posibles para continuar operando. “Es la única solución para poder seguir abiertos”, asegura en declaraciones que recoge la prensa británica.

Ferrer también apunta a la adopción de un modelo similar al italiano, en el que el pago se realiza en la caja al llegar al establecimiento. Según explica, “en el 85% de los restaurantes de Italia, sobre todo los tradicionales, los pedidos y pagos se hacen en la caja, donde suele estar el propietario”, añade.

Además, en otros lugares turísticos de España, como en Valencia, también se pide ya parte del dinero de la reserva por adelantado.

Una experiencia distinta para el cliente

Estos nuevos métodos podrían modificar la experiencia habitual de los clientes, especialmente de los visitantes internacionales, y limitar las formas de pago aceptadas en los establecimientos. Se recomienda a los turistas que consulten si sus tarjetas de débito o crédito conllevan comisiones en el extranjero, ante un posible aumento de locales que operan sin efectivo.

Desde el ámbito empresarial, algunas voces insisten en que el contacto humano sigue siendo clave. Anselmo Cardona, gerente de la histórica cafetería Can Joan de s'Aigo, en Palma, defiende que “en la hostelería, el calor humano siempre será necesario”, aunque reconoce que “la automatización es imparable”.

A juicio de Cardona, los cambios tecnológicos afectarán sobre todo a los locales de comida informal, mientras que los establecimientos de gama alta y los bares tradicionales probablemente mantendrán los modelos clásicos de atención al cliente.