Gastronomía

¡Feliz año 4716!

Surtido de dumplings
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La Embajada de la República Popular de China en España, junto con el Ayuntamiento de Madrid y la Comunidad, ha organizado numerosas actividades para acercar a los madrileños la cultura y la tradición china con motivo de la celebración de su entrada de año nuevo, en la que se festeja el Año del Mono. ¿Sabía que, según su calendario, nos encontramos en 4714?

Para conocer más sobre esta cultura, acudí a la llamada de Paloma García, del Hotel Palace, donde descubrí la culinaria del chef Don Zhenxiang, conocido como El Grande Dong (Da Dong). Grande, porque es enorme, mide 1,92, porque la receta de su pato laqueado es famosa en el mundo entero y, sobre todo, porque ha revolucionado la gastronomía china. Tanto es así, que en su país le comparan con Ferran Adrià, de quien es muy amigo. Dispone de cinco restaurantes en Pekín y uno en Shanghai con más de 5.000 trabajadores a su cargo. Es un gran amante de nuestros ibéricos, de hecho, es imagen de Cinco Jotas en su país, formó parte del concurso Cinco Jotas International Tapa Award e, incluso, ha visitado Jabugo para conocer la creación de nuestro mayor tesoro gastronómico. Pero aquí no queda la cosa, ya que tiene previsto inaugurar una escuela junto a Paco Torreblanca.

Una vez presentado a este cocinero chino, relato el menú que, quien lo desee, puede probar en el restaurante La Rotonda del Palace hasta el próximo 6 de marzo. Lo cierto es que las recetas poco tienen que ver con los bocados chinos a los que estamos acostumbrados. Para abrir boca, llegaron unos tomates glaseados rellenos de crujiente de champiñones. Un apunte, Da Dong cuida muchísimo la estética de cada plato. Así, esta receta fría, desvela, simula una tabla de ajedrez en tonos rojo y amarillo, colores que destacan en la fiesta de la primavera, que denominan así para diferenciarla de la entrada de nuestro año nuevo. Continuamos con unas costillas de cerdo agridulces, servidas sobre una pizarra como plato y acompañadas de unas hojas verdes y de plantas de azúcar. Son bocados que ellos suelen armonizar con licores fuertes, elaborados tanto con cereales como con trigo o con arroz. Incluso con zumos de verduras y con infusiones calientes. La sopa con huevas de choco, para tomar en taza, se antepuso a unos langostinos salteados, que llegaron demasiado hechos para nuestro paladar occidental, mientras que la salsa para acompañarlos estaba para comerla a cucharadas. La col estofada con castañas en salsa de azafrán fue uno de los platos más aplaudidos, también porque el color dorado del caldo es el símbolo de la fortuna. Los dumplings detallan la hora cero del año nuevo chino, además de poseer la forma de una moneda antigua, de ahí que resulten unos bocados a presidir la mesa durante el festejo, por eso de que también simbolizan riqueza. El fin de fiesta lo marcaron unas bolitas de arroz con azúcar de flor de canela.

Pasadas estas celebraciones, no hace falta una excusa para reservar mesa en un chino apetecible. Mis preferidos son el Asia Palace, por supuesto, propiedad de Roger Chen, igual que Zen Market, si tengo posibilidad de dejar tiritando la tarjeta de crédito. Muy divertido es el plan de Casa Lafu y el huoguo, también llamado la fondue china, una picante experiencia que merece la pena disfrutar en compañía. Y porque me gusta el picante, me entusiasma la cocina sichuanesa de El Bund. También la que preparan en Baiwei, mientras que los dim sum me los reservo para Tse Yang, en el Hotel Villamagna, el de pato con foie y el de vieiras se llevan la palma. Por auténtico, me quedo con el ya conocido como el chino de Usera. Se llama Royal Cantonés y aquí hay más comensales chinos que occidentales, que acuden a saborear esa maravillosa barbacoa cantonesa con pato, cerdo rojo y panceta crujiente. Resulta el establecimiento diez para conocer las verdaderas recetas cantonesas. Además, el jefe de cocina de China Té fue reconocido con una medalla de la gastronomía china por saber transmitir la cultura gastronómica oriental en Madrid. Cierto, hay numerosos locales que seguro deberían ocupar también estas líneas, pero ya les digo, estos son mis preferidos.