Infraestructuras ferroviarias

Carnero pide al Gobierno que la futura estación de trenes de Valladolid no eche por tierra el soterramiento

El alcalde firma una moción que se debatirá en el próximo pleno del 10 de marzo con la que pretende que los grupos se posicionen acerca del proyecto proyectado por el ministro Puente que impedirá soterrar las vías a su paso por la ciudad

Jesús Julio Carnero atiende a los medios de comunicación
Jesús Julio Carnero, alcalde de ValladolidMiriam Chacón/Ical

El Ayuntamiento de Valladolid prosigue con su cruzada contra el Gobierno de España y el ministro de Transportes, Óscar Puente, para conseguir que den marcha atrás en la integración ferroviaria de la ciudad y apuesten por soterrar las vías en la capital del Pisuerga.

Este lunes, a través de una moción firmada por el alcalde Jesús Julio Carnero, el Consistorio vallisoletano pide al Ejecutivo de Sánchez que abra un proceso de diálogo sobre la futura estación de ferrocarril, que ya está presupuestada e incluso licitada, con el objetivo de que su construcción, a la que no se niegan, al menos "no condicione ni impida" el soterramiento futuro.

La iniciativa se debatirá en pleno extraordinario convocado el 10 de marzo para que los grupos municipales puedan expresar su opinión acerca de este proyecto que el propio ministro presentó el pasado 17 de febrero dejando claro que tanto la profundidad de la cimentación de la nueva estación, como el sistema de pilotaje que se empleará para ello, impedirá cualquier opción de soterramiento de la red arterial ferroviaria a su paso por la capital.

Un proyecto calificado como "faraónico" o como "megaconstrucción sin sentido" también por la Plataforma del Soterramiento, cuenta con un presupuesto de 253 millones y cuatro años de ejecución, lo que ha molestado también a este movimiento ciudadano y también al Ayuntamiento por cuanto el ministro Puente, cuando era alcalde de la ciudad, siempre dijo que el soterramiento era inviable por cuestiones económicos y por que se alargaría mucho en el tiempo.

La nueva estación prevé un edificio principal de 7.900 metros cuadrados de superficie, un aparcamiento subterráneo de cuatro plantas (29.000 metros cuadrados) con 605 plazas, y un tratamiento del entorno urbano que afectará a 9.300 metros cuadrados

"Si se lleva a cabo la actuación tal y como se ha presentado (...) impediría en un futuro la opción de soterramiento condenando a la ciudad de Valladolid, sin existir ninguna necesidad de hacerlo, ni tampoco ninguna razón que lo justifique, a que en un futuro, si así se acuerda, no se pueda llevar a cabo una opción de soterramiento", apunta el alcalde en la moción.

"Se trata de un proyecto de gran magnitud que afecta necesariamente a la ciudad, su urbanismo, arquitectura y al tejido urbano por sus implicaciones en la conexión y continuidad de éste", recuerda el regidor, quien muestra también su prerplejidad por no haber sido informado del mismo.

Respecto a la futura estación, afirma Carnero que es loable, si bien, insiste en que esta no puede condicionar ni lastrar el desarrollo de la ciudad. En todo caso -añade- debería armonizar la confluencia de intereses de ADIF-AV, como titular y responsable de la infraestructura, y del Ayuntamiento de Valladolid como representante legítimo de los intereses de la ciudad y de sus ciudadanos.n.

Carnero no arroja la toalla e insiste en que la mejor opción es el soterramiento y además es por lo que apuestan los vallisoletanos, teniendo en cuenta que era su medida estrella en la campaña de las pasadas elecciones municipales en la que los ciudadanos les dieron la victoria el bastón de mando, por lo que se ve respaldado por los vecinos.

Por todo ello, el regidor reclama a la sociedad ADIF-AV que no lleve a cabo ninguna actuación de las que tiene previstas para la construcción de la remodelación de la estación de viajeros que condicione o impida la aplicación de otras opciones diferentes.