Política

El PP denuncia la "falta de capacidad" del Gobierno para resolver problemas

El senador popular Jorge Martínez pide a Sánchez que lleve al Congreso la Ley de Fiscalidad Agraria para mejorar la competitividad del sector primario

Conrado Íscar junto a Jorge Martínez Antolín y Mercedes Cantalapiedra
Conrado Íscar junto a Jorge Martínez Antolín y Mercedes CantalapiedraRubén CachoIcal

El PP reclama al Gobierno que lleve la Ley de Fiscalidad Agraria, que ya ha recibido el visto bueno en la Cámara Alta, al Congreso para su tramitación, dado que supondría una reducción de los impuestos que soporta el campo, con una inyección de 700 millones de euros para el sector para mejorar su competitividad.

Así lo aseguraba esta tarde el presidente de la Comisión de Agricultura, Ganadería y Alimentación del Senado, el popular Jorge Martínez Antolín, antes de participar en la Comisión de Agricultura celebrada esta tarde por el PP de Valladolid, donde pedía también al Gobierno que impulse una nueva PAC que no suponga ninguna pérdida en las ayudas directas, así como un plan de desarrollo de infraestructuras hidráulicas para mejorar e incrementar los regadíos.

Martínez Antolín lamentaba la falta de capacidad del Gobierno para resolver problemas como el encarecimiento de la vivienda o el “caos” del trasporte ferroviario, y que quince días después del apagón todavía no ha sido capaz de ofrecer una explicación técnica de un problema que solo en el sector agroalimentario provocó perdidas valoradas en 53 millones de euros, informa Ical.

Asimismo, echaba en cara a Sánchez que tampoco esté sabiendo afrontar los efectos que tendrá la imposición de aranceles por parte de Estados Unidos, y recordaba que el PP ha rechazado las medidas del Gobierno basadas en avales y préstamos, dado que no van a apoyar “un mayor endeudamiento al que ya somete a diario el presidente del Gobierno a agricultores, ganaderos y a sector agroalimentario.

Por el contrario, Martínez Antolín reivindicaba que en el PP sí que apuestan por mejorar la competitividad del campo y de las empresas con el fin de que los productos españoles puedan competir en el resto del mundo. “Después de lo ocurrido con el apagón, la primera medida es proporcionar estabilidad al sistema energético, con el fin de que no vuelva a ocurrir lo que ha ocurrido”, decía, mientras apelaba a la necesidad de que se prolongue y se alargue la vida útil de las centrales nucleares, y demandaba una mejora de las líneas de distribución para atender la demanda de todas las nuevas industrias y de aquellas que quieren afrontar procesos de descarbonización.

La reducción de la burocracia y la normativa, la puesta en marcha de un fondo con el dinero proveniente de los aranceles que reciba España destinado a mejorar la competitividad del tejido productivo y la apertura de nuevos mercados son otras de las propuestas de los populares.