Sociedad

El secreto de ganar la lotería en Navidad

"Hay mucha leyenda urbana y anecdotario diverso para soñar con la ansiada combinación y poder ser más feliz que una perdiz en la lluvia de millones y copar cabeceras de telediarios"

Los loteros de la administración número 3 de Manises celebran haber repartido 460.000 euros con la venta de un décimo del "gordo" de la lotería de Navidad, el 5.490, y de una serie del quinto 88.509, esta última íntegramente en ventanilla y a particulares
Agraciados celebran que les haya tocado "El Gordo"Manuel BruqueAgencia EFE

Ya sólo quedan unos pocos días para que se realice el sorteo más famoso de España. Los niños de San Ildefonso cantarán a los cuatro vientos la ansiada combinación del bombo que un año más, giro tras giro, hace encoger el corazón de los más creyentes.

Iniciado en 1812 para solventar económicamente la invasión de Napoleón “El Gordo de la Navidad” que de momento se sigue llamando así, toquemos madera para que el revisionismo no lo rebautice, hará las delicias de practicantes y profanos en la materia de la suerte siendo comidilla, alegría y regocijo de toda buena conversación matutina navideña.

Hay mucha leyenda urbana y anecdotario diverso para soñar con la ansiada combinación y poder ser más feliz que una perdiz en la lluvia de millones y copar cabeceras de telediarios.

¿Pero en qué reside el secreto de la felicidad? ¿En el dinero? ¿En no abandonar nunca el poder? ¿En el amor? ¿En poder montar en Falcon? ¡Bah, pamplinas Mr. Scrooge! El secreto está clarísimo: una buena manta, sofá y peli y ver como afuera se pelan el culo de frío, que somos gente sencilla, honrada y dichosa.

Bromas aparte, son fechas para recordar y querer estar con nuestros seres queridos y de intentar superponerse a lo meramente escaparatista y económico de la navidad, aunque estoy convencido de que si no hubiera parné de por medio estas felices fiestas podrían ser cuestionadas como un elemento más de la civilización cristiana occidental no sea que no fueran demasiado modernas y adaptadas a los nuevos tiempos.

Lo cierto es que al margen de ver películas como “Sólo en casa”, cantar villancicos y comer buen turrón quien quiere puede aterrizar su alma y tener unas horas de relax mental para poder poner en orden sus ideas y valorar las cosas buenas que tenemos en nuestra vida. Todo el ruido al que hemos sido sometidos como ovejas del Belén durante el año cesa durante unos días, permitamos escuchar lo que dice nuestro niño interior y valorar como va nuestro orden de prioridades en el día a día.

El dinero es un invento del ser humano, todos los billetes tienen un valor numérico, pero cada persona, cada individuo, cada ser humano es único en este momento, en este planeta y en esta circunstancia. Que no se nos pase la vida queriendo ganarla. Que los sorteos y juegos de azar sean eso “juegos” que no nos distraigan de ese lapsus de ser personas y así poder reír y aprender de las cosas gratis de la existencia.

Así que el próximo viernes saldrá el número agraciado, no se coman la cabeza y si quieren jugar pues jueguen al que quieran, la ilusión también hace un festival de felicidad en nuestros cerebros, sólo por eso, pagar este amable “impuesto” es divertido, pero siempre sabiendo que la moderación y el sentido común van por encima de todo premio.

A lo mejor ya nos ha tocado la lotería y no lo sabemos, porque el verdadero secreto de ganar la lotería es ganar salud o ganar la vida directamente, que hay muchos sorteos en los hospitales que día tras día dan felicidad y estos premiados, no salen en los telediarios.

¡Qué la suerte os acompañe!