Sociedad

Villafranca del Bierzo (León) ‘revive’ a los ‘maios’ para dar la bienvenida a la primavera

La fiesta, de Interés Turístico Provincial, repite ritos ancestrales que buscan dejar atrás el invierno y pedir buenas cosechas

Fiesta de los Maios de Villafranca del Bierzo (León)
Fiesta de los Maios de Villafranca del Bierzo (León)César SánchezIcal

La localidad leonesa de Villafranca del Bierzo ‘revivió’ este miércoles 1 de mayo a sus ‘maios’, mozos vestidos de árbol, en una celebración ancestral, declarada Fiesta de Interés Turístico Provincial, en la que se celebra el fin del invierno y la llegada de la primavera.

Se trata de una cita que se vive cada año el 1 de mayo, y que se inicia a primera hora de la mañana con la recogida de las ‘cañaveiras’, las ramas con las que después cada barrio viste a los ‘maios’, que recorren las calles al ritmo de la música de la Escola de Gaitas, con cánticos y pidiendo a los vecinos las ‘castañas mayas’.

Bajo estos ‘árboles vivientes’ se encuentran ‘mozos’ jóvenes, ya que ni los niños ni personas demasiado mayores pueden aguantar el peso de la vestimenta durante varias horas. “Además apenas pueden moverse, solo caminar con pequeños pasos”, explica Marisa Cela, de la Escola de Gaitas, entidad que cada año organiza esta fiesta.

La celebración comenzó ya el día anterior, con la quema del burro del invierno, una figura hecha con materiales reciclados y flores que, después de pasear por las calles de la villa del Burbia, ardió para “decir adiós al invierno y dejar atrás todo lo malo”. El burro de invierno es una figura tradicional de estas antiguas fiestas de primavera, que se celebran por toda España, de diferentes maneras.

Las flores adornan también hoy los balcones y ventanas de las casas de Villafranca, con el objetivo de dar vida a todas las calles por donde pasean los ‘maios’. La fiesta finaliza con la reunió de todos los ‘maios’ en la plaza Mayor y una comida campestre con la que se reinicia el ciclo vital de las cosechas, informa Ical.