El drama del delta del Ebro, una catástrofe “histórica”: así era y así ha quedado tras el paso de “Gloria”

El mar ha engullido el delta del Ebro, corazón de la biodiversidad y enclave de gran valor ecológico golpeado gravemente por el temporal Gloria. “No había visto nada igual”, ha resumido el alcalde de Deltebre, Lluís Soler, en declaraciones a TV3. Las primeras cifras de los destrozos son severas: el agua del Mediterráneo ha penetrado hasta 25 metros tierra adentro, ha inundado tres kilómetros de arrozales (podrían verse afectados hasta un tercio del total) y ha engullido lugares como la Barra del Trabucador.

El flanco izquierdo de la desembocadura ha sido el más afectado por el oleaje y la preocupación se esconde ahora en la Isla de Buda, un espacio de 1.000 hectáreas de alto valor ecológico y medioambiental, con hasta 350 especies de aves en sus lagunas (mención especial para los flamencos), extensos arrozales y humedales de gran valor ecológico, de referencia en Europa. De hecho, en las imágenes vía satélite se puede ver la zona completamente anegada.

El temporal y el fuerte oleaje también han azotado playas vírgenes como la Punta del Fangar y Riumar. Tras la tregua de estas últimas horas, las lluvias torrenciales podrían volver por la tarde. El Ayuntamiento de Deltebre se plantea pedir la declaración de “zona catastrófica”.

El presidente de la Generalitat, Quim Torra se ha desplazado hoy hasta el Delta, lugar que ha asegurado que está “amenazado por una catástrofe natural histórica” y se ha comprometido ante los alcaldes de la zona a impulsar un “plan de acción inmediato” con una partida presupuestaria concreta.

La Federació de Cooperatives Agràries de Catalunya (FCAC) insiste en la gravedad de los daños sufridos por una parte de los cultivos y las cooperativas del litoral catalán. “La situación es especialmente catastrófica para las cooperativas arroceras del Delta del Ebro”, han señalado a través de un comunicado. Las dos cooperativas principales, Arrossaires del Delta de l’Ebre y Càmara Arrossera del Montsià (producen el 75% del total del arroz en Cataluña) están en riesgo después de que la crecida del mar haya provocado inundaciones en los campos de hasta tres kilómetros y haya afectado más 3.000 hectáreas, sobretodo en el flanco izquierdo.

“Con una costa y ramblas hiperurbanizadas es urgente aplicar un plan de adaptación al cambio climático y una gestión integrada en nuestras costas”, ha reclamado Greenpeace a través de Twitter en referencia a lo sucedido en el delta.