Música

Los misteriosos reyes de las bandas sonoras: De “Spiderman” a “500 días juntos”

¿Puede una banda que nadie conoce ser la primera opción de toda película del siglo XXI para buscar una canción que la represente? Sí, y la respuesta es Spoon

Spoon ponían hasta seis canciones en su banda sonora
Spoon ponían hasta seis canciones en su banda sonoralarazonArchivo

La música en el cine no deja de ser una forma de reforzar una idea o emoción. Por ejemplo, si alguien quiere dejar claro que el protagonista es un tipo seguro de si mismo y que siempre mira hacia delante, pues pone el «Stain’ Alive» de los Bee Gees y lo consigue en 0,3 segundos. Eso lo ha hecho, entre otras, el original «Fiebre del sábado noche», «Madagascar», «Virtuosity», la segunda parte de «Cariño, he encogido a los niños», Chicken Little» o la tercera parte de «Agárralo como puedas».

Lo mismo se puede decirse de canciones como «What a wonderful world», de Louise Amstrong, la mejor forma de crear un bienestar melancólico como en «Good morning Vietnam», «Fred Clause», «¿Conoces a Joe Black?», «Doce monos» u otra vez «Madagascar», que continene la banda sonora más típica de la historia. Si alguien quiere hacerse el malo o reforzar la idea de su rebeldía tiene dos canciones seguras, «Bad to the bone», de George Thorogood and the Destroyers, que se puede ver en «Terminator II», «3000 millas a Graceland», «Este chico es un demonio» o «MEgamind»; o «Born to be wild», el clásico de Steppenwolf, que se oye en «Easy Rider», «Borat» o en «Un verano loco».

En total, todas estas canciones se han podido ver en más de un centenar de películas y series de televisión en los últimos 50 años. Entre el ranking también encontraríamos canciones como «White Rabbit» o «Somebody to love», de Jefferson Airplaine, la mejor manera de reflejar los 60; «Gimme Shelter», de los Rolling Stones, que sale en todas las películas de Martin Scorsese; o «Walking on sunshine», idónea para reflejar momentos de felicidad o para usarla como contrapunto irónico, como en «American Psycho.

Sin embargo, en los últimos diez años una banda ha conseguido convertirse en los auténticos reyes de las bandas sonoras. Lejos del mundo independiente, nadie los conoce, pero en su Texas natal, son una especie de estrellas y sus discos de finales de la primera década del siglo XX son considerados como clásicos dentro del círculo del inde rock y el power pop más arty y desenfadado. Su nombre es Spoon y en a penas una década sus canciones han servido para musicar 66 películas o series de televisión. No está mal, sobre todo para ellos, porque cada vez que alguien proyecta una de estas series o películas, ellos cobran su proporción de derechos de autor. Uno no da dinero, pero 66 dan mucho, pero que mucho dinero.

Ejemplo de modernos

Su música es tan cinematográfica y expresiva que sirve para reforzar una multitud de ideas y emociones. Pero sobre todo ayudan a enfatizar esa idea de modernidad donde cabe todo ya que Spoon, si son algo, son heterodoxos y hasta cabareteros, dentro de un espectro rock, por supuesto. La primera vez que salieron en el cine fue en «Cosas de tíos», una película protagonizada por Jason Lee y Selma Blair, que buscaban en la banda esa arpobación de los tiempos modernos. La canción era «You gotta feelin», una frase repetida a la extenuación a partir de una potente base rítmica para sentirse bien y bailar. Ese mismo año también salió en «Dos tontos muy tontos II». Aunque su canción más popular es «The underdog», que ha salido en «Te quiero, tio», «17 otra vez» o «500 días juntos».

Las comedias los adoran, de «¡Marchando!», con Ryan Reynolds y Anna Faris a «Boda a la vista», aunque también han aparecido a documentales nominados a Oscar como «Fast Food Nation» o la dramedia de prestigio «Más extraño que la ficción», con Will Ferrell y Emma Thompson, y en donde se podía escuchar hasta seis de sus canciones. La lista es infinita, de «Monstruoso» a «Spiderman: Homecoming», en el que su ya clásico «The underdog» servía para presentar a Peter Parker y su llegada a su insituto. «Carta blanca», «Cómo acabar con tu jefe» o «Mejor... solteras» son otros ejemplos de la sobre explotación cinematográfica de su música.

Por no hablar de la televisión, porque aquí ya el término es obsesión. Ha salido en «Fargo»; «Shameless»; «Suits»; «Skam»; «the royals»; «The Flash»; «Sillicon Valley»; «Misfits»; «Chuck»; o «Parenthood», entre otros. Algo tienen estos chicos que representan a la perfección la contemporaneidad, eso está claro. Bien por ellos.

¿Quién son Spoon?

La banda se fundó en el ya lejano 1993, así que tienen una trayectoria de más de 25 años. Liderados por la voz ansiosa y rota de Britt Daniel, su fama no llegó hasta 2007 cuando publicaron su ya clásico «Ga ga ga ga ga» que contenía la canción que más ha establecido su fama, «The underdog», canción que ellos no querían incluir en el álbum. Han venido en varias ocasiones a Barcelona y hasta tres veces al Primavera Sound.