Cultura

Yo te leo, tú me lees: recomendaciones de escritores para sobrellevar el confinamiento

Elvira Lindo, Katixa Aguirre, Manuel Astur o Eva Baltasar aportan su granito de arena a la cuarentena

Saber leer
Saber leerAlejandro OleaLa Razón

Todo apunta a que el 11 de mayo las librerías podrían reabrir. Mientas llega ese momento, una serie de autores nos hacen sus recomendaciones por este Día del Libro virtual y nos hablan de sus lecturas imprescindibles: desde los clásicos hasta voces nuevas, desde la poesía al ensayo. Lecturas que no nos debemos perder en estos tiempos de confinamiento.

Katixa Agirre, “Las madres no”, Tránsito.

“Un corazón demasiado grande”, de Eider Rodriguez, (Literatura Random House).

“Quiltras” de Arelis Uribe, (Tránsito).

“El infinito en un junco. La invención del libro en el mundo antiguo” de Irene Vallejo, (Siruela).

“Tristes por diseño. Las redes sociales como ideología” de Geert Lovink, (Consonni).

Manuel Astur, “San, el libro de los milagros”, Acantilado.

“Franny & Zooey”, de J. D. Salinger (Alianza), porque si el humanismo fuera una religión, esta sería su biblia y porque siempre vuelvo a él en todas mis islas desiertas.

“Una leve exageración”, de Adam Zagajewski (Acantilado). Los apuntes de un poeta bueno, llenos de sabiduría de la auténtica (la que trata de iguales a los otros) y de luz.

“Contra Florencia”, de Mario Colleoni (La Línea del Horizonte). Un ensayo emocional maravillosamente escrito que nos demuestra que la historia del arte es la historia del amor por la vida.

Anna Ballbona, “No soc aquí”, Anagrama.

“Poeta chileno”, de Alejandro Zambra (Anagrama).

“Si aquest carrer fos meu” / “Si esta calle fuera mía” (Edicions de 1984, Entre Ambos), de Stefanie Kremser.

“Guillem”, de Núria Cadenes (Amsterdam).

Eva Baltasar, “Boulder”, (Club Editor/Literatura Random House).

“El Crist de nou crucificat” (Club Editor) / “El Cristo de nuevo crucificado” (Acantilado), de Nikos Kazantzakis.

“El arte de perder”, de Elizabeth Bishop (Literatura Random House)

“L'home de mar” (Ed. 1984) / “Allí, donde se acaba el mundo” (Literatura Random House), de Catherine Poulain.

“Un home enamorat” (L'altra ed.) / “Un hombre enamorado” (Anagrama), de Karl Ove Knausgard.

“La badala del cafè trist” (L’altra ed.) / “La balada del café triste” (Austral), de Carson McCullers.

Alberto Conejero, “En esta casa”, Letra Versal.

“Los desnudos”, de Antonio Lucas, (Visor).

“La belleza del marido”, de Anne Carson, (Lumen).

“Una costilla sobre la mesa”, de Angélica Liddell, (La Uña Rota).

“La vida no es una biografía”, de Pascal Quignard, (Shangrila Ediciones).

“Hágase mi voluntad”, de Angelo Nestore, (Pre-Textos).

Elvira Lindo, “A corazón abierto”, Seix Barral.

“Casas y tumbas” de Bernardo Atxaga, (Alfaguara).

“El día que dejé de comer animales”, de Javier Morales, (Sílex).

“El río”, de Ana María Matute, (Nórdica).

“El doctor Centeno”, de Benito Pérez Galdós, (Alianza).

“La llama” de Leonard Cohen, (Salamandra).

Begoña Méndez, “Heridas abiertas”, Wunderkammer.

“Voces de Chernóbil”, de Svetlana Alexiévich, (Penguin Random House).

“Enero”, de Sara Gallardo, (Editorial Malas Tierras).

“Mi año de descanso y relajación”, de Ottessa Moshfegh, (Alfaguara).

“Los últimos testigos”, de Cynthia Ozick, (Lumen).

“Poesía reunida”, de Enriqueta Ochoa, (Fondo de Cultura Económica).

Ricardo Menéndez Salmón, “No entres dócilmente en esta noche quieta”, Seix Barral.

“Una niña en el camino”, de Raduan Nassar (Sexto Piso), porque permite al fin tener a nuestra disposición la obra completa de un escritor tan esquivo como memorable.

“El cuerpo”, de Mircea Cărtărescu (Impedimenta), porque confirma otra vez que, a día presente, no existe en Europa un novelista tan audaz y libre como el maestro rumano.

“KL: una historia de los campos de concentración nazi”, de Nikolaus Wachsmann (Crítica), porque es un libro que ingresa, por derecho propio y con todos los honores, en la historiografía básica para comprender la peripecia del nazismo.

Ana Merino, “El mapa de los afectos”, Destino.

Recomiendo para empezar dos libros que he tenido el privilegio de ver nacer, y presenciar todo el proceso de su gestación y soy consciente de que están maravillosamente escritos:

“Alegría” de Manuel Vilas, (Planeta).

“A través del Quijote” de José María Merino (Reino de Cordelia).

Además, dos poemarios que son realmente conmovedores:

“Actores vestidos de calle” de Luisa Castro (Visor).

“Matria” de Raquel Lanseros (Visor).

Y también un libro de cuentos formidable:

“Mudar de piel” de Marcos Giralt Torrente (Anagrama).

Cristina Morales, “Lectura fácil”, Anagrama.

“La musa fingida”, de Max Besora. (Males Herbes).

“Ni siquiera los muertos”, de Juan Gómez Bárcena, (Sexto Piso).

“Regina & Celeste. Una correspondencia”, de Regina Fiz Santos y Celeste González (La Uña Rota).

Elvira Navarro, “La isla de los conejos”, Literatura Random House.

“Estamos en el borde”, de Caroline Lamarche (editorial Tránsito). Este libro sí es una novedad. Son relatos extraordinarios, de alto voltaje literario (la escritura de Lamarche me recuerda a Thomas Wolfe) sobre personas solitarias, animales y un planeta herido. Ganó el Goncourt de relato.

“Solaris”, de Stanislaw Lem (Impedimenta), que no necesita presentación. La traigo a mis recomendaciones porque la he leído durante el confinamiento (en la edición de Impedimenta) y me ha parecido que, en nuestro encierro, todos somos un poco esos hombres que están en el planeta del mar viscoso conviviendo con sus fantasmas, sin posibilidad de escaparse.

“Las moradas”, de Santa Teresa de Jesús, para desapegarnos del mundo, que siempre es algo bueno, y porque la santa también era sabia. La edición que anda por casa es la de Austral.

Jordi Nopca, “La teva ombra”, Edicions Proa

“Fulgentius”, de César Aira, (Literatura Random House).

“La mort i la primavera”, de Mercè Rodoreda, (Club Editor).

“Mi año de descanso y relajación”, de Otessa Moshfegh, (Alfaguara).

Galder Reguera, “Libro de familia”, Seix Barral.

"El maestro y Margarita" de Mijail Bulgákov, (Ediciones Nevsky).

"El niño que robó el caballo de Atila", de Iván Repila (Seix Barral).

"Flores fuera de estación" de Margarita Leoz (Seix Barral).

"Saber hablar con las plantas" de Marta Orriols (Lumen).

La serie “Los buenos veranos” de Zidrou y Jordi Lafebre (Norma Editorial).

Marta Sanz, “Pequeñas mujeres rojas”, Anagrama.

“Nuestra parte de noche” (Anagrama), de Mariana Enríquez.

“Heridas abiertas” (Wunderkammer), de Begoña Méndez.

“Todo arde” (Alfaguara), de Nuria Barrios.

Juan Pablo Villalobos, “La invasión del pueblo del espíritu”, Anagrama.

“Nuestras vidas”, de Marie-Hélène Lafon (Minúscula).

“Un hombre que duerme”, de Georges Perec (Impedimenta).

“Poeta chileno”,de Alejandro Zambra (Anagrama).