¿Y si “Star Wars” nos hablara del confinamiento y la desescalada?

Hoy es 4 de mayo, el llamado “May the Fourth”, es decir “que la fuerza te acompañe”, día que se ha convertido oficialmente en la gran celebración de “La guerra de las galaxias”, e internet se ha llenado de teorías maravillosas y nuevas reflexiones en torno a las tres trilogías de la saga. La más extraordinaria, la que relaciona las nueve películas de la serie creada por George Lucas con el confinamiento y la desescalada.

Básicamente, la teoría incide en que la estructura dramática de todas las películas es igual y si sustituyes los elementos de la lucha contra el Imperio por los de la lucha contra el coronavirus, el resultado es el mismo. Veamos el ejemplo:

Las tres trilogías parten del mismo arranque arquetípico. Iniciamos cada serie siguiendo a pobres niños abandonados en pueblos desérticos en el que no hay nada que hacer. Primero fue Luke Skywalker, después Anakin Skywalker y por último, Rey. Son seres confinados, espíritus para los que el destino tiene algo más reservado que vivir aislados en un desierto sin mucho que hacer, y ellos lo saben, lo sienten. Su personaje representaría nuestra actual condición en confinamiento, atrapados por el coronavirus, incapaces de cumplir todo nuestro potencial, y con ganas de empezar nuestra verdadera aventura.

En toda la serie, el coronavirus estaría representado por el Imperio o la Nueva Orden, elemento externo que busca la inmovilidad de todos los seres humanos hasta reducirlos a su mínima expresión. Una vez limitado su potencial, son mucho más fáciles de controlar y manipular a voluntad. ¿Quién sería aquí la fuerza rebelde? Está claro que nuestros sanitarios, epidemiólogos, expertos e investigadores, que trabajan a contrarreloj no sólo para curarnos del mal, sino para buscar nuevas fuerzas y alianzas que nos permitan combatirlos.

Empieza aquí la siguiente fase de la película y la desescalada. Los protagonistas entran en contacto con las fuerzas rebeldes, es decir nuestros expertos y epidemiólogos, y les descubren que hay todo un mundo ahí fuera y que ellos pueden participar activamente para liberarlo. Esta típica historia de iniciación y descubrimiento nos abre las puertas a salir los primeros pasos a la calle, las primeras batallas, y las primeras victorias.

¿Cómo acaban todas las películas? Con una gran celebración. Las fueras rebeldes, con la ayuda imprescindible de nuestros protagonistas, es decir, nosotros, hemos conseguido acabar con el imperio o el coronavirus y por tanto ya no hay motivo para el distanciamiento social. Así que siempre se ha de acabar con una gran fiesta, como las que habían antes de la dictadura del virus, y volver a abrazarnos a nuestros seres queridos y, sobre todo, crear nuevos seres creídos.

Por tanto, en este 4 de mayo, todos los amantes de la saga de “La guerra de las galaxias” han de ser Luke Skywalker o Rey y empezar a vivir nuestra gran victoria intergaláctica contra el coronavirus. Sólo necesitamos que la fuerza nos acompañe...