Esta es la aeronave más grande en el último siglo

El Hindenburg, no cabe duda, ha alcanzado el estatus de mito gracias a sus más de 240 metros de largo. Esto lo convirtió en la aeronave más grande de la historia. Pero desde aquellos tiempos la tecnología y la ciencia han evolucionado en velocidad, seguridad y prestaciones. Pero en tamaño nos hemos estancado. Al menos así era hasta que llegó el Pathfinder 1, la aeronave más grande del último siglo. O casi.

Se trata de un prototipo de dirigible eléctrico que su fabricante, LTA Research, espera que impulse una nueva era en los viajes aéreos respetuosos con el clima y acelere el trabajo humanitario de su financiador, el cofundador de Google Sergey Brin. La aeronave cuenta con tecnología de drones, como controles de vuelo por cable, motores eléctricos y sensores lidar. Todo ello en una longitud mayor que la de tres Boeing 737, potencialmente capaces de transportar toneladas de carga a lo largo de muchos cientos de millas.

Quedan por delante una serie de pruebas de vuelo cada vez más ambiciosas, antes de que el Pathfinder 1 se traslade a Akron, Ohio, donde LTA Research está planeando un dirigible aún más grande, el Pathfinder 3. El objetivo es producir una familia de dirigibles para proporcionar ayuda en caso de desastres, así como el transporte de pasajeros sin emisiones de carbono.

Con 124,5 metros de largo, el Pathfinder 1 eclipsa a los actuales dirigibles e incluso al enorme avión Stratolaunch diseñado para lanzar cohetes orbitales. Es el avión más grande que surca los cielos desde el gigantesco dirigible Hindenburg de la década de 1930. Aunque similar en apariencia a esa desafortunada aeronave, y utilizando una góndola de pasajeros suministrada por Zeppelin, el Pathfinder 1 se construyó principalmente desde cero utilizando nuevos materiales y tecnologías.

La aeronave de LTA utiliza helio estable en lugar de hidrógeno inflamable como gas de elevación, contenido en 13 celdas gigantes de nailon resistente y monitoreado por sistemas láser lidar. Una estructura rígida de 10.000 tubos reforzados con fibra de carbono y 3.000 bujes de titanio forman un esqueleto protector alrededor de las celdas de gas, rodeado por una ligera piel sintética de Tedlar. A esto le suma doce motores eléctricos alimentados por generadores diésel y baterías permiten el despegue y aterrizaje vertical. Los motores propulsan el Pathfinder 1 a hasta 65 nudos (unos 120 km/h), aunque sus vuelos iniciales serán a velocidades mucho más bajas.

"Contamos con una metodología sofisticada que nos permite reproducir condiciones del mundo real utilizando bancos de pruebas - señala Jillian Hilenski, ingeniera mecánica senior de LTA -. Sin embargo, las pruebas de vuelo dinámicas a bordo proporcionan los mejores datos sobre el estado y la eficiencia del dirigible".

A principios de septiembre, la FAA emitió un certificado de aeronavegabilidad especial para el Pathfinder 1 que permitía vuelos de prueba. Inicialmente, esas pruebas se realizarán a solo unos metros del suelo. A estas les seguirán maniobras sencillas, antes de una serie de vuelos sobre la Bahía de San Francisco. Los primeros 50 vuelos del Pathfinder 1 cubiertos por el certificado de la FAA, permitirán vuelos a no más de 500 metros de altura y utilizarán dos pilotos en lugar del único piloto para el que fue diseñada la nave originalmente.

Si bien el Pathfinder 1 puede transportar unas cuatro toneladas de carga, además de su tripulación, agua de lastre y combustible, los futuros dirigibles humanitarios necesitarán capacidades mucho mayores. También es probable que utilicen tecnologías libres de carbono, como pilas de combustible de hidrógeno, para obtener energía. Eso implicará un trabajo largo y lento para validar las nuevas tecnologías y demostrar, a la FAA y a los clientes que pagan, que una nueva generación de dirigibles supergrandes puede igualar el historial generalmente excelente de seguridad y confiabilidad de los aviones comerciales.

El certificado experimental de la FAA para el Pathfinder 1 expira en septiembre de 2024, lo que implica que los 50 vuelos deben hacerse antes de esa fecha.