Drogas

Detenido un matrimonio por usar un chalé de lujo donde vivían con menores para plantar marihuana

La Guardia Civil interviene 1.000 plantas de marihuana en un chalé de Calpe

La Guardia Civil interviene 1.000 plantas de marihuana en un chalé de Calpe
La Guardia Civil interviene 1.000 plantas de marihuana en un chalé de CalpeLa RazónLa Razón

Un matrimonio formado por un hombre de 38 años y una mujer de 29, españoles, ha sido detenido por presuntamente tener una sofisticada plantación de marihuana con un millar de plantas en el interior de un chalé de Calpe, donde vivían con sus dos hijos, uno de 8 años y otro un bebé recién nacido.

Según la Guardia Civil, la pareja procede de un conocido clan familiar asentado en la Región de Murcia, con numerosos antecedentes por tráfico de drogas, y habían depositado una fianza por alquilar el chalé de 12.000 euros, con una renta mensual de 2.000.

El cultivo intensivo en este chalet situado en una urbanización céntrica de Calpe, con zonas ajardinadas y piscina privada, incluía un enganche ilegal a la red eléctrica para la generación de luz y aire, el cual había generado un colapso en el abastecimiento de suministro al resto de los vecinos de la urbanización.

Según la Guardia Civil, todo el capital del que disponía el matrimonio procedía del tráfico de drogas. La pareja actuaba con total impunidad, sin tratar de ocultarse bajo otra actividad laboral que hiciera de tapadera.

En el registro se descubrió que habían convertido en invernaderos de producción intensiva más de 250 metros cuadrados de la vivienda, principalmente en el sótano, donde había una sala de unos 200 metros cuadrados con 850 plantas, y también en la primera planta, con 150 más.

Las plantas se hallaban en diversas fases de maduración, lo que facilitaba a los presuntos autores la recolecta periódica, y la entrada permanente de beneficios.

Además de las 1.000 plantas de marihuana, han sido incautados 200 gramos de cogollos, numerosos aparatos para la infraestructura de las plantaciones, centenares de maceteros y 1.000 euros en efectivo procedentes de la actividad ilícita.

Tras ser puestos a disposición del juzgado de Instrucción de Dénia, han quedado en libertad con cargos con la obligación de comparecer semanalmente en sede judicial.