Transporte público
Renfe refuerza la información al usuario y los buses alternativos para compensar los retrasos en las Cercanías de Valencia
La ministra Sánchez se compromete a recuperar las frecuencias de antes de la pandemia para el mes de junio y reduce el precio de los abonos un 30 por ciento hasta abril
El robo de mil metros de cable en la estación de Massalfassar el pasado mes de diciembre fue la gota que colmó el vaso. Los usuarios de los Cercanías de Renfe tuvieron que soportar una nueva reducción de un servicio deficitario que sufre cancelaciones y retrasos diarios. La ministra de Transportes, Raquel Sánchez, prometió días después medidas de aplicación urgente para resolver esta cuestión que ha presentado esta tarde.
Hoy, tras una reunión con el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, ha anunciado una serie de medidas “inmediatas y tangibles” para mejorar la movilidad cotidiana. “No hablamos de miles de millones de euros, ni obras con largo plazo. Son iniciativas que ponen al ciudadano en la toma de decisiones” y con el objetivo de que este servicio vuelva a ser fiable para los usuarios.
El malestar generado por el deficiente servicio preocupa sobremanera al Gobierno valenciano que encuentra pocos motivos para defender la tarea del Gobierno socialista en esta cuestión.
Para revertir esta situación Sánchez se ha comprometido a recuperar los servicios que se anularon con motivo de la pandemia de manera progresiva antes del mes de junio. Del mismo modo, ha avanzado que este mes de enero se recuperará el 90 por ciento de las frecuencias del servicio afectadas por incendio de Massalfassar.
Como medidas para compensar los retrasos, ha asegurado que habrá más autobuses para suplir las cancelaciones y se rebajará del 35 por ciento el precio de los abonos durante el primer trimestre de este año. La reducción se aplicará a partir del 20 de enero, pero con efecto retroactivo desde principios de año en el abono mensual, el abono mensual ilimitado y en la tarjeta «Studios». Además, se mantiene el servicio devolución «Xpress» por el que ya se indemniza a los ciudadanos con un nuevo billete en caso de cancelación o retraso superior a 15 minutos.
La ministra también ha asegurado que habrá mejoras en la información que llega a los usuarios. Se harán campañas en medios de comunicación locales, se mejorará la megafonía y la iluminación en las estaciones y ha contratado a 60 personas que ofrecerán datos actualizados del servicio en 35 estaciones, tanto en días laborables como en festivos.
Por último, ha anunciado la puesta en marcha de la iniciativa “Centinela” Cercanías que permitirá analizar semanalmente cómo están funcionado estas medidas. Se sabrá cuántos trenes han sido cancelados, cuántos han llegado con retraso y los motivos. La Generalitat valenciana recibirá esta información que se abordará en una comisión con representantes del Ministerio.
Por lo que respecta a la incorporación de maquinistas, ha admitido que la situación de pandemia ha ralentizado la formación de personal, pero ha afirmado que en los próximos meses se alcanzarán los 5.500 maquinistas para toda España, sin especificar en cuánto se verá incrementada la plantilla de la red de Cercanías de Valencia.
La ministra ha insistido en que el Ministerio ha realizado un profundo diagnóstico de la situación actual para conocer este descenso de calidad en las Cercanías de València, que se ha reflejado en una pérdida del 36 por ciento de los pasajeros entre 2006 y 2019.
El presidente Puig ha valorado positivamente estas iniciativas y ha asegurado que la ministra está intentando “hacer lo más rápido posible lo máximo posible”. No obstante, ha remarcado estar “profundamente preocupado” por la calidad del servicio de Cercanías en la Comunitat, si bien ha considerado que la presencia de la ministra en Valencia “evidencia la preocupación real del Gobierno y la voluntad de resolver el problema lo más rápido posible”.
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