Mazón cambia su Gobierno para salvar la crisis provocada por la DANA

Mientras Valencia seguía en alerta por una nueva DANA, en el Palau de la Generalitat se apuntalaba la comparecencia del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, en Les Corts, prevista inicialmente para hoy. Sin embargo, a última hora de la tarde, Aemet elevó a rojo el nivel de alerta y desde el Parlamento valenciano comunicaron que se retrasaba al viernes.

La expectación es máxima, pues desde Presidencia remiten a ella a todo aquel que busca confirmar las conjeturas sobre cómo se va a enfrentar Mazón a lo que queda de legislatura.

Los hechos confirmados hasta ahora son que la estructura del actual Consell debe adaptarse a la situación de emergencia en la que está en estos momentos toda la Comunidad Valenciana.

La vicepresidenta del Consell, Susana Camarero, admitió que Mazón diseñó un equipo «para una legislatura normal», pero que tras la DANA del pasado 29 de octubre, hay que adaptarla «a la nueva realidad».

No se descarta, por tanto, la creación de nuevas consejerías. Aunque Mazón siempre ha presumido de austeridad, las circunstancias son excepcionales.

En esta nueva etapa es seguro que Camarero tendrá un papel destacado. Tras la salida de Vox del Gobierno ya se quedó como única vicepresidenta. Su experiencia, su aplomo y su extraordinaria capacidad de trabajo la han colocado desde los días posteriores a la tragedia en un lugar destacado.

De hecho, ejerce de facto como portavoz del Consell, dejando en un segundo plano a la también consejera de Hacienda, Ruth Merino, quien tiene la tarea de rehacer unos Presupuestos que debían haberse presentado el pasado 31 de octubre.

Camarero afirmó que todo el equipo de Gobierno se encuentra con fuerzas para salir adelante de esta situación. «La responsabilidad que tenemos ahora nos lleva a seguir trabajando sin descanso para ayudar a esa recuperación de las zonas afectadas».

El presidente Mazón trabaja en diseñar un Consell que tenga como línea básica de actuación una incuestionable gestión en las ayudas que deben recibir todas las víctimas. No obstante, al mismo tiempo debe generar las condiciones necesarias para que la economía valenciana salga de la situación actual.

Según un informe de Cámara Valencia, los 68 municipios impactados por la DANA albergan a más de 48.700 empresas, de las cuales más de tres cuartas partes pertenecen al sector servicios. En términos de PIB, generan 21.819 millones de euros y emplean a 264.883 personas.

Estos dos ámbitos de actuación, sumados a un refuerzo en las Emergencias, podrían quedar englobados en un único departamento, que tendría rango de vicepresidencia y que quedaría bajo el mando de Camarero.

Restaría competencias, por tanto, precisamente a la Consejería de Innovación, Industria y Turismo, que depende de una de las consejeras que más ha quedado expuesta durante la gestión de la crisis. Nuria Montes es una persona de muy cercana en lo personal a Mazón, pero su punto fuerte es el Turismo, un área que, igualmente, debe encontrar la manera de tirar de la economía valenciana.

Montes fue cuestionada por la falta de empatía con las víctimas, un fallo que ella misma reconoció y por el que pidió perdón. No obstante, una afectada volvió a reiterar esta acusación en una cadena nacional dando todavía mayor resonancia a su actitud.

La que se da por segura es la destitución de la consejera de Justicia e Interior, Salomé Pradas. Su salida sería la consecuencia de su actuación durante la constitución del Cecopi. Por si había alguna duda sobre la falta de determinación, reconoció durante una entrevista en À Punt que fue un técnico el que le informó de la existencia del sistema Es-Alert a las seis de la tarde del fatídico 29 de octubre. Más tarde matizó esta afirmación.

La realidad obliga a Mazón a buscar un Consell que no cometa ni un solo fallo más y que conozca a la perfección el terreno sobre el que debe trabajar, pues no habrá periodo de adaptación. Está dispuesto a seguir al frente y en su propuesta debe demostrar que tiene un plan para salir de la mayor catástrofe de su historia.

Legislatura rota por el temporal

La legislatura que arrancó en junio del año pasado y que fluía no solamente con calma, sino con el viento a favor, para el PP de Carlos Mazón, se ha visto bruscamente interrumpida por la trágica DANA que destrozó la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre y que ha puesto en el punto de mira la gestión de las emergencias del actual Consell. La multitudinaria manifestación del pasado sábado en Valencia, convocada por varias entidades de izquierda, en la que 130.000 personas pedían la dimisión del presidente, ha agitado todavía más unos ánimos que Mazón busca apaciguar.